Sotogrande es la perla inmobiliaria de NH Hoteles y una joya pretendida por los grandes fondos internacionales desde hace años. Sin embargo, el que ha sido presidente de NH durante 15 años, Gabriele Burgio, nunca fue partidario de dar el paso adelante y vender la sociedad.
Ahora, su salida forzada por el núcleo duro de accionistas ha disparado el interés y la cotización de la inmobiliaria con sede en San Roque (Cádiz) ante la expectativa de que ésta pueda entrar en el programa de desinversiones del grupo, que controla el 97,72% de su capital.
Está por ver a qué precio estaría dispuesto NH a escuchar ofertas para una potencial venta de Sotogrande. Según fuentes cercanas a algunos de los mayores fondos del sector, se podrían estar preparando ofertas alrededor de los 250 millones de euros por Sotogrande.
Es decir, que hay inversores dispuestos a pagar un prima cercana al 50% sobre el actual precio en bolsa de la inmobiliaria.
La cifra está muy lejos de los hasta 800 millones que le fueron ofrecidos a Burgio en pleno boom, pero superan de largo el valor en bolsa de la compañía, que hoy apenas alcanza los 170 millones de a pesar de la fortísima subida que ha experimentado el valor –un 27% en plena caída de la bolsa- desde los cambios en el cúpula directiva de NH, el 18 de febrero.
La subida de Sotogrande contrasta con la evolución de la acción del grupo hotelero en bolsa desde la misma fecha. Se revaloriza un 7%.
NH no ha tardado en poner en marcha la máquina desinversora tras el nombramiento como presidente de Mariano Pérez Claver, un hombre fuerte de Caja Madrid, ahora Bankia, que también preside SOS Corporación Alimentaria. La semana pasada, NH cerró la venta de cinco hoteles en Alemania y Austria al fondo de inversión Invesco por 168 millones.
La operación, que contempla una opción de venta de otros cinco hoteles, ha supuesto para el grupo unas plusvalías de 28 millones de euros.
Para NH, la venta de activos se ha convertido en un requisito sine qua non para reducir su abultada deuda de 1.000 millones de euros, todo un lastre en un momento en el que el sector hotelero atraviesa una profunda crisis. Máxime si se tiene en cuenta que la mitad de esa cifra, 500 millones de euros, vencen este año.
Lejos de su mejor momento
La crisis ha impactado con dureza en las cuentas de Sotogrande, un nombre asociado al lujo y al golf en la provincia de Cádiz donde tiene residencia algunas de las mayores fortunas nacionales y extranjeras.
En 2010, Sotogrande perdió 21,1 millones de euros, el doble de los números rojos de 10,5 millones del año anterior. Los ingresos financieros de la inmobiliaria alcanzaron los 285.000 euros.
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