Grecia

  • La complicación de la situación griega, por los problemas para aprobar los ajustes necesarios para obtener los 130.000 millones de euros del segundo rescate, ha condicionado el resultado final de la semana, en la que la bolsa española ha perdido el 0,72 por ciento.

Raimundo Díaz

Madrid, 11 feb.- La complicación de la situación griega, por los problemas para aprobar los ajustes necesarios para obtener los 130.000 millones de euros del segundo rescate, ha condicionado el resultado final de la semana, en la que la bolsa española ha perdido el 0,72 por ciento.

El resultado final de este período estuvo condicionado por la caída del viernes, cuando se escenificó la división en el Gobierno griego con la dimisión de un ministro y otros altos cargos, la mayoría del partido ultraderechista LAOS, cuyo presidente, George Karatzaferis, había rechazado apoyar los recortes.

Las informaciones sobre la aceptación o el rechazo del plan de ajuste propuesto por la "troika" -BCE, FMI y la Comisión Europea-, finalmente aprobado por el Gobierno griego, y sobre la quita de la deuda griega, marcaron el ritmo semanal.

Las amenazas de "Merkozy" o el Eurogrupo para que los políticos griegos decidieran rápidamente los recortes y los elevados niveles en que se encontraban las bolsas -Wall Street se acercaba a 13.000 puntos y se situaba en niveles de mayo de 2008- también influyeron en la cautela que presidió la negociación la mayor parte de la semana.

A pesar de la incertidumbre que generaba la "cuestión helena", que incidió en la evolución del mercado de deuda -la prima de riesgo española subía hasta 335 puntos básicos y la rentabilidad de los títulos a 10 años avanzaba hasta el 5,3 por ciento-, la bolsa española alcanzaba los máximos del ejercicio el jueves al rozar los 9.000 puntos.

Para que regresara a niveles desconocidos desde finales de octubre de 2011, el mercado contó con nuevas medidas de estímulo monetario adoptadas por el Banco Central Europeo (BCE) y el Banco de Inglaterra.

El BCE aceptará temporalmente más créditos como garantía en sus operaciones de refinanciación y el Banco de Inglaterra aumentó su programa de compra de activos en 50.000 millones de libras.

Respecto a la evolución semanal de las empresas del IBEX 35 -está compuesto provisionalmente por treinta y seis-, bajaron veintiséis y subieron diez.

La mayor caída correspondió a IAG, el 6,7 por ciento, seguida de Mediaset, que bajó el 4,43 por ciento, en tanto que Gamesa cedió el 4,3 por ciento.

OHL encabezó la lista de empresa con ganancias al subir el 2,64 por ciento; ArcelorMittal avanzó el 2,03 por ciento, y Caixabank, el 1,89 por ciento.

De los grandes valores sólo subió Banco Santander, el 0,59 por ciento, mientras que Telefónica perdió el 2,34 por ciento; Repsol, el 1,16 por ciento; BBVA, el 0,72 por ciento, e Iberdrola, el 0,09 por ciento.

La próxima semana, en la que el IBEX partirá de 8.797,10 puntos, además de Grecia, el mercado estará pendiente de la publicación de diversas estadísticas, como el PIB de la zona euro y el japonés de cierre de 2011 o la confianza inversora en Alemania, además de esperar a conocer las actas de la Reserva Federal o resultados empresariales.

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