Impuestos pagados por los brasileños equivalen al 33,56 por ciento del PIB

Río de Janeiro, 23 sep.- El 33,56 por ciento de todo lo producido el año pasado en Brasil, es decir un poco más de la tercera parte, quedó en manos del Estado debido a la alta carga tributaria del país, según un informe divulgado hoy por la administración federal de impuestos.

De acuerdo con el fisco, la carga tributaria en Brasil subió desde el 33,14 por ciento del producto interior bruto (PIB) del país en 2009 hasta el 33,56 por ciento del PIB en 2010.

Ello significa que los brasileños pagaron cerca de 1,23 billones de reales (unos 654.255 millones de dólares al cambio actual) en impuestos el año pasado.

Según el informe, la recaudación aumentó hasta ese valor récord principalmente porque la propia economía brasileña creció un 7,5 por ciento el año pasado, su mayor expansión en casi tres décadas.

Además, la recaudación tributaria aumentó un 8,9 por ciento el año pasado en términos reales (ya descontada la inflación), es decir que los nuevos impuestos permitieron que los ingresos fiscales crecieran por encima del propio PIB.

El fisco alegó que el crecimiento de los tributos obedeció principalmente a la expansión de la economía debido a que la única modificación fiscal aprobada por el Legislativo el año pasado fue el aumento del impuesto sobre las operaciones cambiarias y los gastos con tarjeta de crédito en el exterior.

Del total de impuestos pagados por los brasileños, casi el 70 por ciento terminó en los cofres del Gobierno federal (central), en tanto que el restante se los distribuyeron los gobiernos regionales y los municipales.

Según el estudio de la administración federal de impuestos, la carga tributaria en Brasil es inferior a la del promedio de los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE).

En los países de la OCDE la carga tributaria promedio en 2009 fue del 34,8 por ciento del PIB.

Pese a ello, la carga brasileña se ubica por encima de la de países ricos como Estados Unidos (24 por ciento) y de otros emergentes como México (17,5 por ciento).