Internet y la globalización, claves de un mercado en auge de falsos productos

  • La globalización, la mano de obra barata e internet son las claves del auge de los productos falsificados, en el que el "top manta" es sólo la cabeza de un alfiler perfectamente elaborado con criterios de crimen organizado, y donde el consumidor no es consciente del daño que esta actividad genera.

Alberto Santacruz

Alicante, 4 jun.- La globalización, la mano de obra barata e internet son las claves del auge de los productos falsificados, en el que el "top manta" es sólo la cabeza de un alfiler perfectamente elaborado con criterios de crimen organizado, y donde el consumidor no es consciente del daño que esta actividad genera.

Detrás de unas gafas de sol o un bolso de marca falsificada se esconde un entramado capaz de generar "unos beneficios millonarios" y provocar unas pérdidas económicas, también millonarias, para el comercio legalmente establecido.

Es la opinión de expertos nacionales y europeos, y de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado que hoy se han dado cita en Alicante para analizar el impacto de las falsificaciones en el comercio local.

Sin dar cifras actualizadas, pues el último informe a nivel nacional se conocerá el próximo viernes en las Palmas de Gran Canaria con motivo del Día Mundial contra la Falsificación, los ponentes en el encuentro de Alicante han subrayado la necesidad de mejorar tanto la lucha contra esta actividad ilegal como la defensa de los derechos de la propiedad intelectual e industrial

¿Por qué compramos productos falsificados? es una pregunta en la que confluyen aspectos socioeconómicos y, posiblemente, personales, y que esta semana desvelará el citado informe.

No obstante, la directora general de la Oficina Española de Patentes y Marcas (OEPM), Patricia García-Escudero, ha adelantado que este auge del comercio de productos falsificados se sustenta en internet, la globalización de los mercados y la mano de obra barata.

Son tres elementos que el crimen organizado utiliza para vender, curiosamente, lo que el consumidor ya sabe: productos falsos.

Otra cuestión de análisis sería quién los compra. Según el director general de la Asociación para la Defensa de la Marca, José Antonio Moreno, "los jóvenes, principalmente".

Economía de guerra en sus bolsillos, criterios particulares a la hora de entender el mercado o una posible rebeldía a la actual estructura económica y comercial son factores que, sin haber sido apuntados públicamente en esta jornada, podrían estar detrás de esta apuesta juvenil por el producto falsificado.

Pero !cuidado¡, según han advertido los analistas, porque este comercio ilegal, además de generar efectos negativos sobre la economía y el empleo, puede provocar daños en la salud de los consumidores, como los falsos medicamentos.

El ejemplo más claro ha sido puesto de relieve entre risas, pero muy en serio, por el director del Observatorio Europeo de las Vulneraciones contra los Derechos de la Propiedad Intelectual, el francés Paul Maier.

"Por favor, la pequeña pirula azul -en alusión a la conocida pastilla de ese color contra la impotencia masculina- no se la compren por internet porque el efecto puede ser contrario y el peligro puede ser enorme", ha afirmado.

Organizada por el Ayuntamiento de Alicante, esta jornada ha servido para conocer algunos datos relevantes.

Según un estudio de la Cámara de Comercio Internacional, de 2011, la vulneración de los derechos de propiedad industrial supone para los países del G-20 una reducción global de PIB en 125.000 millones de dólares y la perdida de 2,5 millones de puestos de trabajo.

Mostrar comentarios