La Autoridad Alimentaria se dota de normas para garantizar su independencia

  • La Autoridad Europea para la Seguridad Alimentaria (AESA) anunció hoy que se ha dotado de nuevas normas para garantizar su independencia y acallar las críticas surgidas en los últimos años.

Bruselas, 5 mar.- La Autoridad Europea para la Seguridad Alimentaria (AESA) anunció hoy que se ha dotado de nuevas normas para garantizar su independencia y acallar las críticas surgidas en los últimos años.

La legislación se aplicará a las "declaraciones de interés" que publican quienes participan en los dictámenes de la agencia para informar de su trabajo, actividades, currículum y de los proyectos de investigación en los que está implicados, informó la AESA en un comunicado.

En los últimos años se han extendido las críticas a la Autoridad Alimentaria por parte de algunas organizaciones no gubernamentales, como ecologistas, que han atribuido a la entidad científica una postura favorable por ejemplo a las empresas que venden Organismos Genéticamente Modificados (transgénicos).

Las nuevas disposiciones aumentarán el nivel de escrutinio y las salvaguardas, al garantizar unos principios generales "más claros y transparentes", que se aplicarán a científicos, funcionarios, miembros del panel de gestión y organizaciones.

La directora de la AESA, Catherine Geslain-Lanéelle, señaló que la agencia comprende que el valor de sus recomendaciones científicas está vinculado al nivel de confianza del público y que por ello debe garantizar la independencia en todos los aspectos de su trabajo.

Las nuevas reglas, que se presentaron hoy en Bruselas, fijan además criterios para evaluar a los expertos y una lista de los tipos de intereses, con directrices sobre si entran o no en conflicto con la labor de la entidad científica.

En los casos en que se identifique un posible conflicto, se prohibirá la participación del experto en el trabajo de la agencia o que pueda llevar a cabo una tarea concreta.

Por ejemplo, los científicos que estén empleados en áreas como la alimentación o la industria de los piensos, "están excluidos de forma categórica de poder ser miembros de cualquier tipo de grupo científico", indica un comunicado.

Por primera vez, las normas se aplicarán además a organizaciones externas que contribuyan al trabajo científico de la autoridad alimentaria.

Mostrar comentarios