La calificación de Standard & Poor's y resto de agencias equivale al aprobado

Standard and Poor's sigue la senda de la recuperación española a la que previamente ya se engancharon las otras dos grandes, Moody's y Fitch. Sin embargo su beneplácito, al elevar la nota de España, tiene especial importancia porque en la historia de la crisis ha sido el calificador más severo. Hasta cinco veces llegó a bajarnos la nota. El camino del descenso, lo emprendimos en 2009, cuando perdimos las buenas notas que se habían conquistado a principios de la década del 2000.

Ahora, reformas y buenas perspectivas económicas consiguen emprender la reconquista de la calificación, pero queda mucho para volver a la triple A, la matrícula de honor.

Actualmente nuestras calificaciones se encuentran en el "aprobado".

-Moody's: Baa2, con perspectiva de estable

-Fitch: BBB+

-Standard & Poor's: BBB

En lo que queda de año habrá nuevas revisiones de la calificación de deuda española. Las próximas citas son para Moody's el 20 de junio y y el 17 de octubre. Mientras que Fitch y S&P se reservan en el calendario el 24 de octubre y el 14 de noviembre.

Equivalencias de las calificaciones

S&P

Moody's

Fitch

Grado de inversión óptimo

(Matrícula de Honor)

AAA

Aaa

AAA

Grado de inversión alta

(Sobresaliente)

AA+

AA

AA-

Aa1

Aa2

Aa3

AA+

AA

AA-

Grado de inversión buena

(Notable)

A+

A

A-

A1

A2

A3

A+

A

A-

Grado de inversión satisfactorio

(aprobado)

BBB+

BBB

BBB-

Baa1

Baa2

Baa3

BBB+

BBB

BBB-

Grado de inversión especulativa

('bono basura')

BB+

BB

Ba1

Ba2

BB+

BB

El papel de las agencias de calificación en la crisis financiera y económica ha sido muy cuestionado y se ha intentado imponer un cierto control por parte de las autoridades.

Este año es el primero en que, por exigencia de la Unión Europea, las agencias desvelen los días exactos en los que emitirán informes sobre las calificaciones soberanas de países, gobiernos autonómicos y locales.

Como hoy, los resultados se harán siempre públicos un viernes, bien una hora antes de la apertura del mercado, o una hora después de su cierre. Eso queda todavía a la libre elección de cada agencia.