Atenas.- La crisis en Grecia se agravó hoy con la muerte de tres personas a raíz de las masivas manifestaciones en Atenas contra las medidas de ahorro del Gobierno griego, lo que arrastrado a la baja a la Bolsa de Atenas.
Tres personas murieron hoy en el incendio de una sucursal bancaria en Atenas y un número indeterminado de personas resultaron heridas durante las protestas convocadas en una jornada de huelga general contra el Gobierno por el severo programa de austeridad en Grecia.
En este incendio, posiblemente provocado por un cóctel molotov, y en otros incidentes hubo al menos cuatro heridos, que fueron ingresados en el Hospital General de la capital, dijo el Ministerio de Sanidad.
Los choques entre los manifestantes y policías comenzaron a media mañana en la Plaza de Sintagma (Constitución) cuando grupos radicales empezaron a agredir a las fuerzas del orden que vigilaban el edificio del Parlamento.
Los fallecidos son dos mujeres y un hombre, empleados de la filial bancaria Marfin Eganatia Bank de una céntrica calle adyacente a esa plaza que trataban de escapar de un incendio provocado por los manifestantes y que se asfixiaron en una planta superior del edificio.
Un cuarto empleado del banco se halla hospitalizado en estado crítico tras haber saltado de un balcón del edificio para escapar de las llamas, según el portavoz policial Vangelis Falarás.
La noticia de la muerte de los empleados bancarios corrió como la pólvora entre los participantes en las protestas, lo que exacerbó aún más los ánimos, como pudo comprobar Efe en el lugar de los sucesos más violentos, en los alrededores de la Plaza de Sintagma.
Las calles y avenidas del centro de Atenas fueron hoy escenario de altercados protagonizados por una población iracunda por el plan de austeridad anunciado por el Gobierno del primer ministro, Yorgos Papandréu.
Este líder socialista acudió al Parlamento a explicar su postura sobre estos disturbios, que arrastraron de nuevo a la Bolsa de Valores de Atenas a la baja. A poco del cierre su índice general caía cerca del 4 por ciento.
En Atenas, los gases lacrimógenos lanzados por unidades antidisturbios se mezclaron con la humareda de contenedores incendiados, pero también ardieron automóviles y la sede de una oficina de inspección de Hacienda en Atenas.
El canal de televisión Ski informó de que en el conflictivo barrio de Exarhia grupos no identificados cometieron actos de pillaje en tiendas.
En otras ciudades griegas, como Salónica, Patras e Ioanina, también se produjeron actos violentos y daños materiales, aunque no se informó de víctimas.
La huelga general convocada en Grecia para hoy por los principales sindicatos, que también afectó a la prensa, es la cuarta en lo que va de año, pero fue rota por diversos medios nacionales, que se hicieron eco inmediato de los violentos incidentes.
A raíz de la protesta quedó paralizado hoy todo el tráfico aéreo, marítimo y ferroviario en el país, mientras el tren metropolitano de Atenas funcionó sólo a horas convenientes para ir a la huelga.
El presidente del Parlamento heleno, Fílipos Pechálnikos, en declaraciones durante una sesión parlamentaria durante las protestas señaló que fue informado de la muerte de los empleados bancarios por teléfono y pidió al foro un minuto de silencio para honrarles.
Las manifestaciones fueron seguidas por un número entre cien mil y 25.000 personas, según fuentes sindicales y policiales, respectivamente, y bloquearon el tráfico rodado en las calles más céntricas.
El Gobierno declaró el estado de alerta para Atenas y ordenó a las fuerzas policiales a personarse en sus dependencias para esta disposición.
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