La prima de riesgo española, que se mide con el diferencial entre el interés del bono español a diez años y el alemán del mismo plazo, ha iniciado hoy la jornada en el mercado secundario en 224 puntos básicos, sin cambios respecto al cierre de ayer, pero posteriormente se ha elevado hasta el entorno de los 230 puntos.
Esta mala noticia llega justo cuando el Tesoro está intentando colocar hasta 4.000 millones de euros en obligaciones a diez y treinta años. Justo antes de comenzar la subasta, la rentabilidad del bono español a diez años, la referencia, subió ligeramente, hasta el 5,380%, desde el 5,359%, mientras que el alemán cotizaba al 3,141%, tasa que también superaba al 3,120% registrado el día anterior.
Como consecuencia, el precio de estos bonos, que evoluciona en sentido inverso al interés que se pague a los inversores, cayó hasta el 100,900% en el caso español y hasta el 100,920% en el caso germano, a la espera del resultados de la subasta española.
La prima de riesgo griega mejoraba hoy hasta los 1.233 puntos básicos, desde los 1.250 registrados ayer, en tanto que la irlandesa veía elevarse su prima de riesgo nueve puntos básicos, hasta quedar en 709, a la espera de la apertura del mercado portugués.
Los seguros de impago de deuda (credit default swap o CDS) referentes a España se encontraban a esta hora en 240.210 dólares anuales para cubrir la posibilidad de impago de 10 millones de dólares en bonos españoles a 10 años.
Respecto a los futuros, los que apuestan sobre la evolución de la deuda europea retrocedían hasta el 124,00 % desde el 124,31 % de la víspera, en tanto que los que anticipan el comportamiento de la estadounidense parten hoy del 122,13 %.
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