A la espera de la reunión del jueves del Banco Central Europeo (BCE) del jueves, la prima de riesgo se estabiliza en los 110 puntos, su nivel más bajo desde mayo de 2010. Algunos expertos aventuran que podría llegar, a lo largo de la semana hasta los 75 puntos, y otros recuerdan las predicciones del ministro de Economía, Luis de Guindos, sobre un cierre de año en 100 puntos.
El bono a diez años, en 1,8%, también se aleja de esos máximos que hace más de dos años hacían temblar al gobierno y las empresas. Era a finales de julio de 2012, cuando el bono se apuntó un máximo del 7,6% y la prima se tensaba en 637 puntos. Según cálculos hechos en su momento por el BBVA, cada 100 puntos de aumento de prima suponían 12.400 millones de pagos adicionales para España y sus empresas. Niveles insostenibles que se fueron atenuando tras la declaración de Mario Draghi, en la que aseguraba que el BCE estaba dispuesto a tomar todas las medidas necesarias para mantener el euro.190 millones menos de intereses por cada 25 puntos de descenso de prima
Esta vez, de nuevo Draghi es el principal artífice de los descensos. Lo que diga el italiano tras la reunión del consejo de gobierno del BCE será determinante tras la expectación creada al reiterar que tomaría las medidas "que fuesen necesarias" para evitar un riesgo deflacionista en Europa. Toda la periferia europea se ve beneficiada. La prima de riesgo de Italia se encuentra en 127 puntos, la de Portugal en 209; e Irlanda, en 64.
El Ejecutivo ya calculó a mediados de año que cada 25 puntos menos de prima equivalen a un ahorro de 190 millones de euros. Si la semana pasada, la prima ya marcó un mínimo en 120 puntos, nuevos descensos en la semana podría añadir otra reducción de factura para el Estado.
Los efectos positivos se notarían más tarde en la economía real. Como explican desde Renta 4, más a medio plazo porque es un efecto en cadena: al reducir coste de financiación, eso impacta positivamente en el PIB. La mejora del PIB llega la creación de empleo pero de más tarde.
La bolsa, por su parte, intenta asentarse en los 10.700 puntos. Draghi también tiene la clave del rally alcista de finales de año. Además de los datos del paro en España pueden influir la reunión de ministros de Finanzas y de Economía de Alemania y Francia. Deben fijar una posición común que impulse el crecimiento en Europa, combinando dos variables difíciles de conjugar: inversión y consolidación fiscal.
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