La situación en egipto afecta al tráfico marítimo de pasajeros


El clima de inseguridad, tensión social y enfrentamiento armado que se vive en Egipto está afectando de forma importante al tráfico marítimo de pasajeros en la zona, aseguraron a Servimedia fuentes de Puertos del Estado, ya que las rutas turísticas que se hacen por el Mediterráneo “han cancelado parte de los destinos a zonas problemáticas”.
Las mismas fuentes señalaron que el tráfico de turistas por el Mediterráneo, en su mayoría en cruceros, “está esquivando las zonas del norte de África, incluido Egipto”, en la medida de lo posible.
Sin embargo, desde el organismo público señalaron que, paradójicamente, se sigue registrando más actividad de cruceros en el resto de puertos del mar Mediterráneo. “Probablemente se supere el movimiento de cruceros que hubo el año pasado”, un 1% a día de hoy.
Es este sentido, apuntaron que este año se cerrará “con cifras muy similares” al anterior, en torno a los siete millones de ‘cruceristas’, aunque sin batir el récord de los ocho millones de 2011.
MERCANCÍAS
En cuanto al tráfico de mercancías, las fuentes consultadas por Servimedia indicaron que actualmente “las navieras están reordenando sus rutas” y no es cuestión de que “el canal de Suez esté mejor o peor”, aunque admitieron que “también debe influir en algún sentido”.
A día de hoy el tráfico de navíos mercantes que hacen uso del canal de Suez transcurre con normalidad. Sin embargo, existe el riesgo de que se decrete toque de queda, lo que afectaría a su funcionamiento habitual.
A pesar de que por el momento el tráfico mercante se desarrolla con relativa normalidad, el precio del crudo ha superado durante estos días los 110 dólares por barril, ante los temores de que el clima de inestabilidad afecte al canal de Suez, por donde pasa la mayor parte del petróleo procedente de los países de la OPEP.
Desde Puertos del Estado admiten que todavía “es pronto para hablar de ello” y no hay nada “cuantificado” por el momento, aunque admiten que los grandes puertos “no lo están notando” y continúan con su movimiento habitual, si bien en líneas generales el tráfico de mercancías ha descendido un 5%.
ALTERNATIVA POLAR
El cambio climático ha propiciado que el deshielo estacional en el Ártico sea más pronunciado, como ocurre en el paso del estrecho de Bering, un brazo de mar de 82 kilómetros de anchura situado entre el extremo oriental de Asia y el extremo occidental de América del Norte.
Esta situación ha sido aprovechada recientemente por el navío chino ‘Yong Sheng’, que zarpó el pasado 8 de agosto y navega por esta ruta, con lo que evita cruzar el canal de Suez y presumiblemente le permitirá llegar al puerto de Rotterdam en 33 días, en vez de los 45 habituales.
Esto significa que los meses en los que este paso sea operable, puertos del Mediterráneo que se ven beneficiados del tráfico por Suez, como son el de Valencia o el de Algeciras, dejarían de ser lugares 'de paso' para el tráfico de mercancías que conecta China, Japón y otros grandes fabricantes asiáticos con los principales puertos del norte de Europa. Concretamente, más de un 10% del tráfico de mercancías del puerto de Valencia es de origen chino.
Para Puertos del Estado, el número de mercantes que hacen uso del estrecho de Bering es “relativamente insignificante”, ya que “apenas el 5% está tomando esta vía”. Si bien admiten que todavía “es demasiado pronto para saber cómo afectará” el uso de esta ruta, apuntan que “no parece probable que en cinco o diez años (el Ártico) se vaya a deshelar de una forma tan importante como para que se pueda navegar”.
Por otra parte, el uso del estrecho de Bering requiere unas condiciones técnicas de las que no disponen la mayor parte de los barcos de mercancías. Desde Puertos del Estado recuerdan que este paso sólo se puede utilizar “en determinados momentos” y posiblemente “acompañado por barcos rompehielos”, ya que “no todo el camino está despejado”.
Las fuentes de Puertos del Estado consultadas admitieron que “a día de hoy nos beneficia que las cosas estén como están”, ya que la mayor parte del tráfico intercontinental pasa o bien por el canal de Suez o bien por el cabo de Buena Esperanza, en Sudáfrica, y esos barcos “de alguna u otra manera tienen que pasar por la península”.

Mostrar comentarios