Lagarde destaca la inflación y el paro como los principales retos de Argelia

  • La directora del Fondo Monetario Internacional (FMI), Christine Lagarde, destacó hoy en Argel que la inflación y el paro, especialmente entre jóvenes y mujeres, son dos de los principales retos que debe afrontar la economía argelina.

Argel, 13 mar.- La directora del Fondo Monetario Internacional (FMI), Christine Lagarde, destacó hoy en Argel que la inflación y el paro, especialmente entre jóvenes y mujeres, son dos de los principales retos que debe afrontar la economía argelina.

En unas declaraciones recogidas por la agencia oficial argelina, APS, Lagarde indicó que había instado a las autoridades del país magrebí a "tomar medidas suplementarias para preservar la estabilidad macro-económica y asegurar la estabilidad presupuestaria a largo plazo".

En su segundo día de visita, la presidenta del FMI también felicitó a los responsables argelinos "por el progreso logrado en el último decenio" e indicó que el crecimiento del país "debería mantenerse fuerte, entre el 3 y el 3,5 por ciento, durante los dos próximos años".

Además, para Lagarde, Argelia debe "poner en marcha reformas estructurales para mejorar el clima de negocios, atraer la inversión extranjera directa, desarrollar el sistema financiero y ofrecer formación a la mano de obra (nacional) para cubrir las necesidades de la economía".

En este sentido, mostró la disponibilidad del FMI de "continuar proporcionando asesoramiento sobre política económica y asistencia técnica para reforzar la economía argelina". Durante su visita, Largarde también agradeció la reciente contribución de cinco mil millones de dólares ofrecida por Argelia al FMI el pasado octubre.

"No he venido a pedir un nuevo préstamo, sino solo a agradecer a las autoridades argelinas el préstamo acordado al FMI, lo que refleja una buena gestión de las reservas de divisas", declaró.

Asimismo, hizo una breve alusión a la ley de inversión argelina conocida como la ley del 49-51, que obliga a toda empresa extranjera que quiera operar en el país a asociarse con una contraparte argelina a la que deberá ceder al menos el 51 por ciento de las participaciones.

"Aunque no estoy convencida de la necesidad de compartir el accionariado entre los inversores argelinos y extranjeros, se trata de una decisión soberana de Argelia", dijo la responsable europea.

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