Las aerolíneas temen que se permita contratar vuelos a firmas sin estructura

  • Las aerolíneas españolas temen que la Agencia Española de Seguridad Aérea (Aesa) permita a algunas compañías subcontratar vuelos solo en los meses de mayor demanda en lugar de mantener su propia estructura, porque esto podría suponer la desarticulación de todo el sector.

Madrid, 22 jun.- Las aerolíneas españolas temen que la Agencia Española de Seguridad Aérea (Aesa) permita a algunas compañías subcontratar vuelos solo en los meses de mayor demanda en lugar de mantener su propia estructura, porque esto podría suponer la desarticulación de todo el sector.

Según han explicado a Efe fuentes del sector, este conflicto se ha desatado después de que la aerolínea española Calima anunciara que realizará vuelos chárter al Caribe durante los tres meses de verano con un avión subcontratado a la portuguesa Orbest.

La normativa establece que cualquier compañía europea puede contratar aviones con otra. En el caso español, cuando se trate de la actividad ordinaria de la empresa, esta subcontratación no puede exceder del 30 % de su capacidad para que no afecte a la vulnerabilidad de la compañía.

En el caso de Calima, según explican fuentes del sector, esta dependencia es total, ya que la flota de la aerolínea española es de medio recorrido, de manera que los vuelos al Caribe solo puede realizarlos con el avión contratado a Orbest.

Sin embargo, Calima podría alegar que los vuelos de largo recorrido no son su actividad ordinaria, lo que le permitiría esquivar la limitación.

La "interpretación" de esta norma, que corresponde a Aesa, tiene en vilo al resto de aerolíneas, ya que "si cualquier compañía puede contratar un número ilimitado de aviones a otra aerolínea europea sólo en los momentos de mayor tráfico, se puede plantear si tiene sentido mantener una estructura todo el año".

De hecho, temen que podría "desarticular todo el mercado" de los vuelos chárter, que quedaría reducido "al mínimo".

Por ello, las aerolíneas españolas han pedido una reunión con Aesa para advertirle de las consecuencias que tendría permitir operar de este modo y que, si lo hace, "jugaremos todos a eso", es decir, a prescindir de la estructura y contratar los aviones solo en verano.

De hecho, el caso de Calima es especialmente "preocupante", ya que solicitó estos vuelos después de que se denegara a Orbest el permiso para operar desde España, lo que en la práctica podría ser "alquilar la licencia" de la aerolínea española.

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