Las pesetas sin canjear sobran para comprar el aeropuerto inglés de Gatwick

Madrid.- Los españoles conservaban a finales del mes de octubre 1.745 millones de euros en billetes y monedas de las antiguas pesetas sin canjear, cantidad suficiente para comprar el aeropuerto londinense de Gatwick o para pagar el crédito puente con el que Prisa compró acciones de Sogecable.

Según los datos provisionales publicados hoy por el Banco de España, a finales de octubre aún permanecían sin cambiar 929 millones de euros en billetes y 816 millones en monedas, apenas un millón de euros menos que en el mes anterior.

Con esta cantidad se podría comprar holgadamente el aeropuerto londinense de Gatwick, vendido hace apenas dos meses por el operador aeroportuario BAA, propiedad del grupo español Ferrovial, a una entidad controlada por Global Infrastructure Partners (GIP), por 1.510 millones de libras (aproximadamente 1.661 millones de euros).

Estos 1.745 millones de euros equivalen también aproximadamente al déficit de ingresos de la zona euro en agosto, y permitiría comprar las acciones de algunas de las cotizadas de la Bolsa española, como la constructora OHL, la aseguradora Catalana Occidente o los laboratorios farmacéuticos Almirall.

Hace casi ocho años, en enero de 2002, el Banco de España comenzó a canjear billetes y monedas de la antigua moneda por euros.

Entonces había en circulación 48.750 millones de euros en pesetas, de los que aproximadamente 46.230 millones eran billetes y 2.520 millones monedas.

Un par de meses después, el 1 de marzo de ese mismo año, los españoles abandonaron la moneda que habían utilizado durante 133 años y se vieron obligados a efectuar todos sus pagos en euros.

Hasta el 30 de junio de ese año el canje se pudo efectuar en sucursales bancarios, y partir de entonces es el Banco de España el único autorizado.

En los últimos meses el ritmo de canje oscila entre uno y dos millones de euros al mes, una cadencia que se irá reduciendo paulatinamente, ya que hay grandes cantidades de monedas y billetes extraviadas o en manos de coleccionistas.