Los armadores españoles defienden la legalidad de sus capturas de tiburones

Bruselas.- Los representantes de la flota española aseguraron hoy que sus capturas de tiburones son legales e insistieron en que en las aguas de la Unión Europea (UE) no se practica el llamado "cercenamiento", que consiste en amputar las aletas y después arrojar el cuerpo al mar.

Organizaciones de pescadores, ecologistas y científicos participaron en una reunión, para hablar sobre la consulta que ha abierto la Comisión Europea (CE) con vistas a reforzar las medidas para erradicar el cercenamiento.

Actualmente, la UE prohíbe dicha práctica, pero Bruselas pretende reforzar los controles para asegurar que no se produce en aguas europeas.

El secretario general de la Confederación Española de Pesca (Cepesca), Javier Garat, declaró a Efe que con su iniciativa la CE "ha creado un problema donde no lo hay", ya que el cercenamiento es habitual en los mares de Asia o de otras zonas, pero no en los caladeros comunitarios.

Garat afirmó que durante la reunión las propias organizaciones no gubernamentales (ONG) reconocieron que no hay datos que demuestren que los pescadores europeos practiquen el cercenado.

Añadió que la flota española que captura tiburones "cumple las normas" y aprovecha tanto las aletas como las otras partes del animal, el cuerpo, el hígado e incluso los ojos.

Asimismo, los armadores españoles pidieron a la CE que revise las normas en lo que se refiere a las exigencias en los "ratios", pues ahora la ley establece que al declarar las capturas el peso de la aleta debe corresponder al 5 por ciento del total del animal.

En ese sentido, Garat, que también preside la organización de armadores europeos Europesca, añadió que es necesario tener en cuenta las recomendaciones científicas y elevar ese porcentaje al 6,5 por ciento para dos especies de tiburones, la tintorera y el marrajo.

Según el responsable de Cepesca, las aletas suponen el 45 por ciento del valor de las capturas de tiburones que extrae la flota nacional.