Madrid. Los pensionistas de la región no tendrán que pagar por adelantado los medicamentos

El consejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid, Javier Fernández-Lasquetty, presentó este viernes el documento que, a partir del 1 de septiembre, evitará a los pensionistas tener que pagar por encima del tope establecido en el Real Decreto Ley 16/2012 de 20 abril.
Lasquetty explicó lo que se pretende con esta medida, que es garantizar al paciente que no tiene que desembolsar por adelantado -a la espera de devolución- nada más que lo establecido en la ley; es decir, un máximo de 8 euros mensuales para pensionistas con ingresos anuales inferiores a 18.000 euros y un máximo de 18 euros para aquellos que tengan una pensión superior a esta cantidad. Asimismo, los pensionistas con rentas iguales o superiores a los 100.000 euros aportarán el 60% del precio de la receta, con un límite máximo de 60 euros al mes.
El real decreto establece que se pueden hacer devoluciones semestrales de las cuantías adelantadas por los pensionistas al pagar sus medicamentos, pero la Comunidad de Madrid quiere evitar estas devoluciones y devolver a partir del 1 de septiembre lo que los pensionistas hayan pagado de más desde la aplicación del real decreto, es decir, lo correspondiente a los meses de julio y agosto.
DOCUMENTO DE DISPENSACIÓN
Los pacientes pensionistas podrán obtener el documento de dispensación en los centros de salud. En el momento de entrega, el profesional sanitario del centro cumplimentará el documento incluyendo los datos del paciente, el código de aplicación (cuantía correspondiente a pagar según la pensión recibida anualmente, es decir 8, 18 o 60 euros mensuales), y el mes de validez. La viceconsejera de Sanidad, Patricia Flores, indicó que el uso de la tarjeta es intransferible y propiedad del paciente.
Una vez adquirido el documento, en la farmacia el farmacéutico irá rellenando los campos cada vez que el paciente retire su medicación con el precio de tratamiento y aportación del pensionista, hasta que llegue a su tope máximo (8, 18 o 60 euros, según ingresos), y a partir de ahí el tratamiento se le facilitará sin coste alguno.
Lasquetty afirmó que “en meses posteriores, noviembre o diciembre, este formato se cambiará a otro informatizado, con el que se continuará dando garantía al ciudadano sobre las cantidades a desembolsar”.
Asimismo, manifestó que “es un sistema barato, con un coste mínimo para la Consejería de Sanidad, y tanto los pacientes como los profesionales sanitarios y farmacéuticos lo podrán usar y manejar de manera fácil y sencilla”.
En referencia a la retirada de la tarjeta sanitaria a los inmigrantes irregulares en territorio español, que entrará en vigor a partir del 1 de septiembre, Lasquetty manifestó que "los ciudadanos inmigrantes sin papeles que actualmente estén en tratamiento por padecer una enfermedad crónica continuarán con ese tratamiento".