Nazca resurge de sus cenizas y levanta 185 millones en su tercer fondo

Nazca Capital resurge de sus cenizas. La firma de private equity, que ha pasado por horas muy bajas como consecuencia de la crisis de su promotor y antiguo primer accionista, el grupo Fortis –dinamitado por la crisis y adquirido por BNP Paribas-, vuelve al primer plano en pleno tormenta en el negocio del capital riesgo.

A pesar de las dificultades del sector para conseguir fondos y financiar sus adquisiciones, el grupo ha conseguido levantar 185 millones de euro para su tercer fondo, Nazca III. La cifra se sitúa por encima de las previsiones del propio grupo, que a finales del año pasado ya realizó un primer cierre del fondo en 116 millones de euros.

Entonces, señalaba que el objetivo era cerrar definitivamente Nazca III este año con 150 millones. El siguiente paso es alcanzar los 200 millones en los próximos meses.

El vehículo, que ya está inscrito en la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), supone la resurrección de un grupo que ha conseguido el apoyo de algunos de los inversores extranjeros más importantes.Fuera del capital Fortis después de que los dos primeros ejecutivos de Nazca –Carlos Carbó y Álvaro Mariátegui- recompraran su participación el año pasado, el gigante del capital riesgo holandés Alpinvest se ha convertido en el principal inversor de los fondos del grupo español.

Alpinvest aportó 35 millones de euros el año pasado para apoyar el primer cierre provisional del fondo, en el que también se comprometieron a participar otros inversores internacionales como Danske Private Equity, Scottish Widows, Idea Capital y Parish Capital.

La puesta en circulación de Nazca III certifica que el capital riesgo español vuelve a tener un jugador de primer nivel en el segmento de las operaciones de mediano tamaño después de que la crisis estuviera a punto de llevárselo por delante. Ya cerrado, este fondo realizará operaciones por un importe situado entre los 10 y los 25 millones de euros.

En sus casi diez años de historia, Nazca había levantado dos fondos -Nazca I y Nazca II- por un importe total de 250 millones de euros, con rentabilidades del 50% anual y tres veces el capital invertido, respectivamente. En la última década, Nazca ha invertido y desinvertido en grupos tan conocidos como el de tratamientos capilares Svenson, el de restauración Rodilla o en la cadena de tapas Tabernas Lizarrán.

Entre sus mayores operaciones destaca la compra en 2003 de la Bodega Cosecheros Abastecedores (Casa) –por entonces el segundo mayor comercializador de vino con denominación de origen Valdepeñas- por 60 millones de euros.