Passos Coelho duda de que exista margen para bajar notablemente los impuestos

  • El primer ministro de Portugal, Pedro Passos Coelho, reconoció hoy que a su Gobierno le gustaría aliviar la presión fiscal en 2015, aunque expresó sus dudas sobre el espacio de maniobra del que dispondrá para aplicarlo.

Lisboa, 3 oct.- El primer ministro de Portugal, Pedro Passos Coelho, reconoció hoy que a su Gobierno le gustaría aliviar la presión fiscal en 2015, aunque expresó sus dudas sobre el espacio de maniobra del que dispondrá para aplicarlo.

"Si hubiese margen para ello, no lo dejaremos de hacer, independientemente de que haya o no elecciones", aseguró el líder del Ejecutivo conservador en referencia a los comicios legislativos previstos para el próximo año.

En declaraciones a los periodistas, Passos Coelho consideró "prematuro" hablar de las novedades de los Presupuestos Generales del Estado para 2015, sobre los que actualmente trabaja el Gobierno.

"Tengo dudas de que contemos con un gran margen para hacer cosas de esas -en referencia a la bajada del impuesto sobre la renta-", admitió el primer ministro.

Durante los dos últimos años, el Estado luso cobra una tasa extraordinaria sobre el salario de los trabajadores del 3,5 % que podría desaparecer en 2015, tal y como recomendó la Comisión Europea (CE).

"La CE no necesitaba hacer esa recomendación en la medida en que este Gobierno ya dijo hace tiempo que a medida que las condiciones económicas y financieras lo permitiesen, todas las medidas de carácter extraordinario serán retirada", esgrimió.

El líder de los socialdemócratas lusos -que gobiernan desde 2011 con mayoría absoluta gracias a su coalición con los democristianos- aseguró que en el Ejecutivo no existe "ninguna preocupación de tipo demagógica o electoralista" para intentar aliviar la presión fiscal a toda costa el próximo ejercicio para conseguir más votos.

Sobre la publicación esta semana de una nueva previsión sobre el déficit público con el que cerrará el país 2014, y que se disparó hasta el 4,8 %, Passos Coelho aseguró que Portugal cumplirá con la meta acordada con los organismos internacionales -establecida en el 4 % del PIB- debido a que éstos no contabilizarán una serie de "operaciones extraordinarias" que obligó a elevar este cálculo.

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