Patxi Amezcua considera que hacer cine negro en España es "un reto"

Pamplona, 18 jun.- El director y guionista navarro Patxi Amezcua, que ha vendido los derechos de su película "25 kilates" a una productora estadounidense para una versión en EE.UU., considera que hacer cine negro en España es un hándicap, pero también un reto.

Amezcua, en una entrevista con EFE, dice que se "siente cómodo" con el cine de suspense, el "thriller", policíaco o negro, por lo que sus películas se enmarcan en ese género, aunque según ha afirmado, es "complejo para el público español".

"Al público le cuesta creerse estas historias protagonizadas por españoles, por actores españoles y personajes españoles", ha explicado, por lo que dirigir películas como "25 kilates" para el público nacional "es un reto".

Sin embargo, el director ha seguido trabajando en el género en el que se "divierte como espectador" y se siente "cómodo como director", y con el que "sabe hacer funcionar las historias".

"25 kilates", cuyos derechos acaban de ser comprados en Estados Unidos, trataba del encuentro entre Abel (Francesc Garrido), un cobrador de deudas, y Kay (Aida Folch), una delincuente callejera, que planean un "golpe" que los mezclará con Garro (Joan Massotkleiner), un inspector de policía corrupto que ha robado a unos atracadores kosovares.

Aunque la participación de Amezcua en el nuevo proceso americano es muy limitada, pues ya ha cedido los derechos, el cineasta se ha mostrado "ilusionado" por el proyecto, ya que a su juicio el interés de los estadounidenses en su película "demuestra que hay una trama y unos personajes suficientemente interesantes".

Además, Amezcua siente curiosidad "por ver qué hacen" con su película, ya que los actores, algunas situaciones y sobre todo los efectos especiales, serán distintos por las posibilidades que ofrece un mejor presupuesto y su adaptación a la idiosincrasia estadounidense.

"Ellos pueden permitirse más lujos, porque tienen personajes más variados y con más posibilidades dramáticas, que dan más juego para este tipo de cine", ha valorado a EFE, mientras que al público nacional "le cuesta ver a un policía español sacando una pistola, le cuesta ver ladrones a la española".

"Poco a poco -aventura- el espectador irá aceptando este tipo de películas, con personajes de aquí pero con tramas con un poco de estructura más americanas".

Según Amezcua, el género policíaco o negro está muy identificado con Estados Unidos y su forma de "contar historias", mientras que en España "no hay tradición, hay muy pocas películas de este estilo".

El guionista ha admitido que hubo épocas donde también había mucho cine policíaco francés, pero que en nuestro país, aparte de la tradición de los años 70 en Barcelona, "ha habido directores que han hecho películas sueltas".

Este cineasta sí se ha mostrado deseoso de continuar con sus películas de policías, y ya tiene un par de guiones preparados, mientras negocia la venta, también en Estados Unidos, de los derechos de su última película, "Séptimo".