Pescadores de Algeciras: "Pasamos mucho miedo, vinieron a embestirnos"

Cádiz, 24 may.- Los armadores y pescadores de Algeciras que anoche intentaron faenar en aguas próximas a Gibraltar han relatado hoy que pasaron "mucho miedo" por el hostigamiento de las patrulleras gibraltareñas, un incidente que no evitará que "si no hoy, la semana que viene" vuelvan a la zona en conflicto a trabajar.

"Ese caladero, dejar no lo vamos a dejar", ha asegurado a Efe Andrés Jarauza, patrón de "La Joaquina", uno de los tres pesqueros que anoche quiso tirar las redes en una zona en la que esta embarcación, de 70 años de historia, lleva trabajando desde 1990.

Jarauza, como el resto de los pescadores que iban en las tres embarcaciones de Algeciras, ha explicado que anoche lo pasaron "muy mal" y tuvieron miedo, tanto que incluso algunos llegaron a ponerse el chaleco salvavidas y pensaron en tirarse al mar porque temieron por su vida.

"Vinieron a embestirnos. La zodiac de la Royal Navy empezó a dar vueltas en círculos a gran velocidad alrededor del bote auxiliar, el que lleva la luz", lo que hacía que la lancha se moviera descontrolada durante un tiempo que a este armador le pareció "una media hora, aunque ahí pierdes la noción del tiempo".

"Nos decían que no podíamos pescar, que no se nos ocurriera echar las redes porque estábamos en aguas territoriales de Gibraltar", ha explicado este armador que, aunque normalmente no lo hace por una lesión en la cadera, anoche decidió embarcarse porque "si me quedo en casa me da un infarto".

Pese a la tensión de la situación, y cuando ya había acudido al lugar la Guardia Civil, los pescadores decidieron echar sus redes.

"Las guerras son muy malas, se te sube la adrenalina cuando ves algunas cosas y haces locuras", ha destacado Andrés Jarauza, quien ha señalado que la Guardia Civil hizo una labor "estupenda" y que por eso "nos sentíamos protegidos".

Cuando estaban echando las redes, las patrulleras gibraltareñas se pegaron después a la proa del "Joaquina" para evitarlo, pero ya era tarde.

"Ahí fue donde más miedo pasamos, porque una vez que echas las redes ya no hay margen de maniobra porque se pueden enganchar a las hélices y causar un problema grande", cuenta su armador.

Algo así también debieron pensar las patrullas gibraltareñas porque "en el último momento" se retiraron.

Los pescadores también dejaron la zona, se fueron a otros caladeros, pero volvieron a puerto poco antes de las dos de la mañana sin pescado.

"Ayer no se ganó un duro", cuenta Jarauza. "Qué más quisiera yo que tener el pescado más cerca de mi casa", dice.

Asegura que hoy y los próximos días seguramente evitarán acercarse al caladero del conflicto "a ver si ganamos cualquier cosa por otro lado", pero "la semana que viene o la otra tendremos que volver porque ese caladero dejar no lo vamos a dejar, que se encarguen los políticos de arreglar las cosas".

Juan Manuel Vázquez, armador del pesquero "Unión Vázquez Blanco", que también estuvo anoche en el incidente y vio temer por la vida de tres de sus hijos, dice que las patrulleras de Gibraltar hicieron "maniobras muy peligrosas" y "muchas provocaciones".

"Se permitieron cosas que no se deberían permitir", subraya, seguramente en referencia a que las patrulleras gibraltareñas hablaban con sus altavoces de "aguas territoriales de Gibraltar", que España no reconoce.

Para el presidente de la Asociación de Armadores de Andalucía, Pedro Maza, el incidente de ayer muestra que "cualquier día puede ocurrir una desgracia" en la zona porque "nosotros necesitamos seguir utilizando ese caladero" y Gibraltar ha vuelto a mostrar "su actitud" en este conflicto.