Políticos y empresas confían en que este año se recupere el turismo nacional

  • Políticos y empresarios representativos del sector turístico confían en que en 2014, tras años de caída, comience ya a repuntar el turismo nacional, aunque los niveles de optimismo oscilan entre quienes hablan ya de un año "razonablemente bueno" hasta los que extreman todas las cautelas.

Madrid, 22 ene.- Políticos y empresarios representativos del sector turístico confían en que en 2014, tras años de caída, comience ya a repuntar el turismo nacional, aunque los niveles de optimismo oscilan entre quienes hablan ya de un año "razonablemente bueno" hasta los que extreman todas las cautelas.

Mientras las llegadas de turistas extranjeros no han dejado de crecer hasta convertir 2013 en el mejor año de la historia, con 60,6 millones de visitantes, los viajes de los españoles acumulan hasta noviembre pasado una caída del 3,2 %, aunque desde agosto ese indicador viene encadenando cuatro meses al alza.

En ese cambio de tendencia en los últimos meses de 2013 en el número de viajes que hacen los españoles tanto dentro de España como al resto del mundo es donde pone el acento el ministro de Industria, Energía y Turismo, José Manuel Soria, quien espera una mejora del turismo doméstico.

A su juicio, "a medida que se consolide la mejora de la economía española, tal como apuntan todas las previsiones, tendremos también una mejora en el turismo nacional", señaló en una reciente entrevista con Efe.

También la cadena hotelera Barceló prevé para 2014 "un pequeño repunte" del mercado doméstico.

"Los primeros meses todavía se nota poco, pero la tendencia claramente es a estabilizarse y cuando miramos a unos meses adelante empezamos a ver ya números verdes y crecimiento", señala a Efe el consejero delegado para la región EMEA (Europa, Oriente Medio y África) del grupo, Raúl González.

"Creo que la tendencia es positiva y que veremos un 2014 razonablemente bueno", insiste.

La presidenta de Paradores de Turismo, Ángeles Alarcó, también se muestra optimista tras comprobar cómo, a estas alturas de año, cuentan con muchas reservas de turismo nacional que en estas mismas fechas el año pasado no tenían.

Para el presidente de la Unión de Agencias de Viajes (UNAV), José Luis Prieto, la recuperación del turismo doméstico se traducirá, a su juicio, primero en una recuperación de los viajes de media distancia y nacionales, mientras que los de larga distancia seguirán "en horas bajas".

Y ello, a juicio del presidente de la patronal de agencias de viajes, porque aunque "la crisis en España parece que va por unos senderos de solución innegables, todavía el español está midiendo muy mucho sus gastos".

Entre los más cautos se encuentra el vicepresidente y consejero delegado de la cadena hotelera Meliá, Gabriel Escarrer, quien asegura que su optimismo sobre el comportamiento del turismo nacional es "bastante moderado".

"Seguro que vemos algo de crecimiento porque 2013 ha sido nefasto en lo que se refiere al público nacional. Hasta que no se reactive el consumo no veremos crecimientos muy significativos y para que se reactive el consumo, para mí lo más importante es generar puestos de trabajo", apuntó.

Aunque no dudó en que "habrá mejora", la calificó de "moderada", con crecimientos nunca de doble dígito, sino de un único dígito "y un único dígito quien se aventura a decir cuanto es", añadió.

En la misma línea, el secretario general de la Confederación Española de Hoteles y Alojamientos Turísticos (CEHAT), Ramón Estalella, se mostró tajante al afirmar que la recuperación definitiva del turismo interno "no va a llegar todavía en 2014".

Aunque reconoció que se está detectando "una evolución positiva" y que "se está empezando a perder" el miedo a gastar, recalcó que hay que comparar las cifras con los niveles de 2007-2008.

"Si el año pasado ha sido malo o muy malo. El anterior fue muy, muy malo y decimos que hemos crecido el 2 ó 3 % sobre muy malo no significa que vamos bien", indicó, al tiempo que animó a luchar para conseguir el éxito del turismo internacional y llegar a los niveles de antes de la crisis, "pero todavía va a tardar".

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