Lisboa.- El Gobierno socialista luso criticó hoy la declaración sobre las economías de Portugal y Grecia que hizo el comisario europeo Joaquín Almunia, mientras la bolsa de Lisboa registraba una de las peores caídas de su historia, del 4,98 por ciento.
El ministro portugués de la presidencia, Pedro Silva Pereira, calificó, al término de un Consejo de Ministros, de "infelices" y "engañosas" las afirmaciones de Almunia, que también citó en el mismo sentido a España -donde la bolsa perdió hoy casi el 6 por ciento-, y subrayó las diferencias entre la situación financiera griega y la portuguesa.
De igual modo, el ministro luso de Finanzas, Fernando Teixeira dos Santos, se quejó de la reacción "animal" e "irracional" de los mercados y destacó que la situación de Portugal es "muy diferente" y que además se han adoptado los "compromisos" necesarios sobre las cuentas públicas.
"Las declaraciones del comisario Almunia fueron infelices y engañosas en cuanto a la situación relativa a los diferentes países a nivel económico y presupuestarios", declaró en rueda de prensa Silva Pereira.
"De hecho, lo importante son los datos porque marcan la diferencia", dijo Silva Pereira en relación al comentario de Almunia sobre los problemas que comparten Portugal, Grecia y España, que también fue criticado hoy por el Gobierno español.
El ministro portugués recordó que la deuda pública lusa con un 76,4 por ciento del PIB (Producto Interno Bruto) está por debajo de la media del 78,2 en la zona euro y es muy inferior al 112,7 por ciento de la griega.
El déficit estatal de Portugal, abundó, se encuentra en el 9,3 por ciento, "en línea con la mayoría de los países desarrollados", no es comparable con el 12,7 de Grecia y además el Gobierno luso ha hecho "un ejercicio serio y creíble para reducirlo".
Entretanto, la Bolsa de Lisboa cerró con una caída del 4,98 por ciento y su principal índice, el PSI-20, registró su jornada más negra desde los históricos descensos del inicio de la crisis económica en 2008.
Los expertos y los comentaristas atribuyeron la caída al efecto de las declaraciones de Almunia.
Los peores descensos se registraron en el sector industrial, donde el grupo Sonae, el mayor conglomerado empresarial luso, bajó el 9,49 por ciento, mientras las constructoras y la banca acumulaban descensos superiores al 7 por ciento.
La economía de Portugal había sido ya blanco de malos pronósticos en las últimas semanas por parte de las agencias de calificación de riesgo y la penalización de su deuda en los mercados no ha dejado de subir en los últimos días.
Al evocar los problemas de Grecia, el ministro de la presidencia portuguesa expresó su convicción de que el Ejecutivo heleno ha tomado medidas para afrontar los problemas presupuestarios con firmeza.
Pero señalo que, a diferencia de ese país, las cuentas púbicas lusas presentadas por el Gobierno socialista siempre fueron validadas por el organismo Eurostat.
Teixeira dos Santos consideró por su parte que Portugal tiene un Plan de Estabilidad y Crecimiento para presentar a Bruselas tan "ambicioso" como el de Grecia y que respeta los compromisos para consolidar las cuentas públicas.
Pero admitió que su país debe "dar signos del conjunto de medidas que dan cuerpo a ese compromiso" y hacer llegar el mensaje a los mercados de que Grecia y Portugal son "realidades completamente diferentes" aunque ambas se encuentren en los niveles más bajos de Europa.
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