Saná, 19 ago.- El presidente del Yemen, Abdo Rabu Mansur Hadi, advirtió hoy al movimiento radical chií de los hutíes de las consecuencias de una "temeridad irresponsable", después de que el líder del grupo sugiriera recurrir a la violencia si no es destituido el Gobierno.
La agencia de noticias yemení Saba informó de que el mandatario condenó "las conductas que están fuera de la ley y que se rebelan contra los resultados del diálogo nacional por parte de los hutíes".
El líder del movimiento hutí o Ansar Alá (Seguidores de Alá), Abdel Malek al Huti, en un discurso difundido por la televisión Al Masir, que pertenece al grupo, instó ayer a los yemeníes a protestar contra "el Gobierno autocrítico y las fuerzas influyentes", debido a la reciente subida del precio de los combustibles.
En esa línea, Hadi explicó que las afirmaciones del líder chií "alteran la tranquilidad pública, por lo que es inaceptable desde el punto de vista patriótico y político".
Señaló además que "amenazan la seguridad y estabilidad del Yemen bajo lemas falsos, aprovechándose de los sentimientos de la gente humilde, y que es una costumbre seguida por el movimiento chií".
En respuesta a las declaraciones de Al Huti, los manifestantes chiíes salieron ayer a la céntrica plaza de Al Taguir y marcharon por las calles principales de la ciudad en medio de una presencia masiva del Ejército y de las fuerzas de seguridad, sin que se registrasen actos de violencia.
Los participantes gritaron consignas como "el pueblo quiere derrocar al Gobierno" y levantaron pancartas en las que estaban escritas reivindicaciones como "abajo la corrupción" y "no al empobrecimiento del pueblo".
El pasado 30 de julio, el Gobierno yemení aumentó los precios de los combustibles tras suprimir los subsidios estatales, que cuestan anualmente al presupuesto público cerca de 3.000 millones de dólares.
Por su lado, los países que auspiciaron el traspaso de poder en el Yemen en febrero de 2012 expresaron hoy su gran preocupación por las últimas declaraciones del dirigente chií, por considerar "que afectan el prestigio del Estado".
El acceso a la presidencia de Hadi, en sustitución de Ali Abdalá Saleh, se cumplió con el patrocinio de los países miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU, y el Consejo de Cooperación del Golfo (CCG) Pérsico, además de la Unión Europea.
La preocupación fue expresada en un mensaje firmado por los embajadores de esos países en Saná y que fue enviado a Al Huti, y difundido por los medios de información oficiales.
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