Provincia natal de Kirchner se suma a la presión contra YPF

Buenos Aires, 3 mar.- Santa Cruz, una de las más importantes provincias petroleras de Argentina, se sumó a la presión contra YPF, controlada por la española Repsol, al amenazarla con quitarle las concesiones si no explica un supuesto incumplimiento de un plan de inversiones para aumentar su producción.

El Gobierno del distrito natal del fallecido expresidente argentino Néstor Kirchner, esposo y antecesor de la actual mandataria, Cristina Fernández, intimó a YPF mediante una carta documento enviada al vicepresidente ejecutivo de la petrolera, Sebastián Eskenazi, confirmaron hoy a Efe fuentes del sector de hidrocarburos.

Este viernes la provincia de Chubut había procedido de manera similar al conminar a YPF a cumplir con inversiones acordadas en dos yacimientos de ese también distrito patagónico, bajo amenaza de quitar las concesiones a la petrolera.

La carta enviada por Santa Cruz, que lleva la firma del ministro de Economía provincial, Ariel Ivovich, otorga a YPF un plazo de cinco días para explicar los motivos del "ostensible proceso de desinversión" en 23 concesiones que, según la intimación, "ha producido un perjuicio patrimonial intolerable".

Al igual que tras el ultimátum dado por Chubut, fuentes de YPF consultadas por Efe dijeron hoy que no harán comentarios sobre el asunto.

Santa Cruz y Chubut son dos de las cuatro provincias argentinas más relevantes para YPF, junto con Mendoza y Neuquén.

En sintonía con el Gobierno argentino, desde finales del año pasado las provincias petroleras responsabilizan a YPF de los problemas de abastecimiento de combustible, la caída en la producción y la falta de inversiones.

Al inaugurar este jueves un nuevo período parlamentario con un discurso de más de tres horas, Fernández se refirió a la petrolera durante solo unos minutos y dijo que tomará "las medidas que sean necesarias" para garantizar el abastecimiento de combustible.

El discurso presidencial había despertado gran expectación por los insistentes rumores, nunca confirmados oficialmente, sobre supuestos planes de intervención o incluso nacionalización de YPF.

La embestida del Gobierno argentino sobre la petrolera desató esta semana un maratón de negociaciones, incluidas conversaciones al más alto nivel, y una visita relámpago a Buenos Aires del ministro español de Industria, José Manuel Soria.

YPF, participada por Repsol en un 57,43 % y por el grupo argentino Petersen en un 25,4 %, es uno de los principales inversores en Argentina, el primer contribuyente al Fisco, el mayor productor de hidrocarburos del país y da empleo a 13.500 personas.

Según datos de la compañía, en 2011 realizó inversiones récord, principalmente en exploración y producción, por unos 3.050 millones de dólares, un 50 % más que en 2010, y pagó más de 6.400 millones de dólares de impuestos.