Rosalía Mera, la costurera que se convirtió en la mujer más rica de España

    • La empresaria ha fallecido en su A Coruña natal a los 69 años y figurando como una de las personalidades más poderosas del planeta.
    • Su fortuna superaba los 4.000 millones de euros, aunque Mera se declaró de izquierdas y contraria a los recortes en ámbitos como sanidad y educación.
Rosalía Mera, la costurera que se convirtió en la mujer más rica de España
Rosalía Mera, la costurera que se convirtió en la mujer más rica de España

(Agencias). Rosalía Mera Goyenechea(A Coruña, 1944 - 2013) ha fallecido en un hospital de A Coruña, tras sufrir horas antes un derrame cerebral.

Se convirtió en la mujer más rica de España y en una de las más poderosas del mundo después de fundar el imperio Inditex con su exmarido Amancio Ortega. Antes, a la edad de 11 años, había dejado el colegio para trabajar de costurera.

Nació en el barrio del Matadero, en A Coruña, y con 13 años dejó atrás su infancia para comenzar con su primer trabajo en 'La Maja', una tienda de ropa en la calle San Andrés, donde trabajó con los hermanos Ortega: Amancio y Antonio.

Rosalía Mera y Amancio Ortega se casaron en una iglesia de A Coruña en la década de los 60 y, por entonces, a pesar de tener cierta estabilidad en 'La Maja', iniciaron un proyecto, Zara, que ella asumió como propio.

Decidieron dejar de producir para otros y empezaron a fabricar y distribuir sus propios productos. Se iniciaron con Goa, que fue el antecedente de Zara. En esa época, Mera dio luz a Sandra, su primera hija.

Sus dos talleres, uno en la calle Noya y otro en San Rosendo, apenas le dejaban tiempo libre. Mera volvió a quedarse embarazada y tuvo a Marcos, el único hijo varón de la pareja, con una discapacidad, por lo que requería más atención, motivo por el cual decidió desvincularse de Zara.La separación, en 1986

En 1986 la pareja se separó tomando caminos diferentes. Mientras que Amancio Ortega se dirigía al éxito con Inditex, Rosalía Mera decidía estudiar Magisterio y fundaba Paideia, una organización dedicada a la integración social.

Paideia es mucho más que eso. Se constituye, en abril de 1986, como "un espacio abierto, con una vocación interdisciplinar y pluridimensional, que abarca formación, intervención e investigación, especialmente en Ciencias Humanas y Sociales".

"A lo largo de este tiempo, la institución se ha ido consolidando y expandiendo a través de actividades que han tratado de incidir positivamente en el entorno social gallego, escenario y beneficiario de la mayor de sus proyectos, con la intención de contribuir a la dinamización de su tejido social e institucional, promoviendo una cultura participativa y solidaria", según se autodefine en su página web.

A pesar de haberse desvinculado de Zara, ella siguió formando parte de Inditex, siendo poseedora de casi un 7% de la empresa. También, con una participación del 5%, fue una de las principales accionistas de la farmacéutica Zeltia.

En la víspera de 15 de agosto, inicio del puente, Mera, a sus 69 años, se encontraba de vacaciones con su hija Sandra cuando sufrió una parada cardiorrespiratoria ligada a un derrame cerebral y fue ingresada con pronóstico grave en un hospital de Menorca. Desde allí fue trasladada en un avión ambulancia a su ciudad natal.

Según la agencia de noticias Bloomberg y la revista Forbes, su fortuna superaba de largo los 4.000 millones de euros, lo que la situó en el puesto 66 de las personalidades más poderosas del planeta y como la única mujer española que figura en la lista de esta publicación. Sin embargo, su vida estuvo marcada por los focos sino por su dedicación a la integración social de las personas discapacitadas.Una millonaria diferente

Pese a su condición de millonaria, declaró sus simpatías por el movimiento de los indignados de la Puerta del Sol (el movimiento 15M) y en una de las pocas entrevistas que concedió en su vida confesó que vestía ropa de Zara y que no le gustaba vestir de manera convencional.

También fue discreta cuando se mezcló en multitudinarias protestas ciudadanas tras el desastre del petrolero Prestige, o en las noches en que acudía con amigas a una tasca de su ciudad, "Os Belés", donde se canta hasta el amanecer y se toman tapas de pulpo.

Persona hecha a sí misma, Rosalía Mera siempre defendió el trabajo en equipo y la innovación. "Hay que arriesgarse a fallar, lo que no podemos es repetir. Estamos obligados a cambiar", decía en 2011 al recibir un premio en Bilbao.

Más recientemente defendía en A Coruña los "valores comunitarios" del "bien común" y, en mayo de 2012, en plena crisis económica, señalaba en la presentación del disco del grupo gallego "Luar na Lubre" que al comienzo de la recesión se hablaba de la regeneración del capitalismo, un concepto "ya olvidado".

Hasta el final no renunció a sus orígenes humildes y, en esa misma entrevista, en 2012, expresó recuerdos "magníficos" de su infancia, pese a las dificultades económicas de la época.

Dijo que le gustaban los oficios de su barrio y que le encantaba "el olor a pintura" y los recuerdos de su padre, un hombre que era capaz de "arreglarlo todo".

Además, valoró el espíritu "ambicioso" que mostraba su madre y destacó que alcanzase su deseo de montar una carnicería.

Fue una mujer que a los once años se creía mayor y que se sintió "vieja" a los 40, cuando tuvo que hacer frente a la discapacidad de su hijo y a su divorcio. Sin embargo, pese a estas circunstancias confesó haber salido "fortalecida" de ambos traumas, que le hicieron volcarse tanto en sus negocios como en la labor altruista de su Fundación.

En contraposición con el silencio de su exesposo, Mera se declaró de izquierdas y se posicionó en contra de los recortes en sanidad y educación. "Si regateamos en el tema de la salud, de la infancia, de la educación, nos estamos haciendo un flaquísimo favor", aseguró a los medios el pasado mes de mayo.

También se manifestó en contra de la reforma de la Ley del Aborto en España promovida por el ministro Alberto Ruiz Gallardón y expresó su confianza en que la nueva propuesta de ley "no salga adelante" para que "se deje como está" la norma porque, en su opinión, "está muy bien".

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