La ayuda tenía truco. Los compradores de un coche nuevo que se beneficiaron de los hasta 2.000 euros del Plan E, en realidad han recibido un pico menos. En concreto, una media de 240 euros menos, que deberán devolver a Hacienda, ya que el fisco considera este ingreso como un incremento del patrimonio y exige que se tribute como tal.
Los Técnicos del Ministerio de Hacienda (Gestha), hay más de 250.000 contribuyentes afectados por esta decisión, que critican duramente. De hecho, el año pasado, propusieron al Gobierno que declarara la exención de las ayudas del plan 2000E en el Impuesto de la Renta, entre otros motivos, porque Gestha considera que todas las ayudas y subvenciones públicas deberían estar exentas del Impuesto de la Renta, y no sólo una parte de ellas como sucede en la actualidad.
Como a la mayoría de los contribuyentes se les aplica un tipo marginal del 24%, la media del importe que deberá devolverse al fisco con esta tributación son 240 euros. A cambio, el Estado y las comunidades tendrán una inyección de 51 millones para este duro año de crisis.
Los cálculos de Gestha son los siguientes: si se aplica el 24% a los 500 euros de ayuda estatal, resulta un neto de 120 euros, que debe multiplicarse por los 250.761 vehículos vendidos bajo el Plan 2000E. ¿Resultado? El Estado recauda unos 30 millones de euros. El mismo cálculo se realiza con los 500 euros de ayuda de las comunidades y las 174.903 operaciones que han sufragado, lo que da un saldo de 21 millones de euros. Por lo tanto, en total, las arcas públicas percibirán unos 51 millones.
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