Sustos que por ahora no llegan al mercado

  • Semana de sustos internacionales protagonizados por EEUU e Italia, que no han eclipsado la confianza de los mercados en España tras la presentación de los presupuestos del Estado para 2014 y las buenas noticias de la "troika".

Ana Gamazo

Madrid, 5 oct.- Semana de sustos internacionales protagonizados por EEUU e Italia, que no han eclipsado la confianza de los mercados en España tras la presentación de los presupuestos del Estado para 2014 y las buenas noticias de la "troika".

El lunes comenzó con la llegada al Parlamento de unos Presupuestos que siguen incidiendo en la austeridad pero que prevén un crecimiento económico del 0,7 %.

Presupuestos austeros para reducir el déficit del conjunto de las administraciones al 5,8 % del Producto Interior Bruto y que obligarán de nuevo a apretarse el cinturón a los distintos ministerios que han empezado ya a explicar sus cuentas en el Parlamento.

De forma paralela, la "troika" ha informado a España de que se van haciendo los deberes y ha destacado la posición de solvencia de la banca española tras la recapitalización, "una cómoda" solvencia que hay que seguir vigilando.

En Portugal, la "troika" se mostró satisfecha con la evolución del país vecino aunque no relajó las medidas de austeridad y el Gobierno portugués se comprometió a mantener este plan para garantizar el éxito del programa de rescate.

El desempleo creció en España 25.572 personas en septiembre, la seguridad social perdió 22.242 afiliados y la encuesta del CIS ha reflejado un ligero incremento de los consumidores.

El ministro de Economía Luis de Guindos ha señalado que las cifras de paro reflejan una estabilización laboral en España.

El susto en Europa lo puso el ejecutivo de italiano de Enrico Letta que vio como presentaban su dimisión los cinco ministros de su Gobierno de coalición procedentes del partido de Silvio Berlusconi alentados por su líder, lo que desató el nerviosismo de los socios europeos.

Finalmente, la situación se resolvió con el apoyo a Letta en el Parlamento, incluso con el voto de "Il Cavaliere".

Situación más incierta vive Estados Unidos cuyo Gobierno, por primera vez en 17 años, ha tenido que suspender parte de sus operaciones al no llegar a un acuerdo presupuestario entre republicanos y demócratas.

El problema ha afectado en primer lugar a unos 800.000 funcionarios y podría costar más de mil millones de dólares a las arcas públicas. La amenaza más inmediata tiene la fecha del 17 de octubre ya que si el Gobierno no consigue elevar el techo de deuda podría entrar en suspensión de pagos lo que podría desatar una nueva crisis económica.

Pero estas tensiones internacionales no han repercutido en la confianza en los mercados españoles y la bolsa ha cerrado en máximos anuales con un incremento de un 2,09 % de su índice Ibex 35 hasta 9.420,9 puntos.

La prima de riesgo, el diferencial entre el bono nacional a diez años y el alemán, retrocedió 21 puntos en la semana hasta 237 puntos básicos.

En el exterior, Japón ratificó que a partir de abril subirá sus impuestos por primera vez en más de 15 años.

En Europa, las operadoras de telecomunicaciones siguen moviéndose: la falta de acuerdo en la recapitalización de Telecom Italia, en la que Telefónica tiene una importante presencia, hizo que dimitiera su consejero delegado Franco Bernabè, mientras que la junta extraordinaria de la holandesa KPN votó a favor de la venta de su filial alemana E-Plus a Telefónica.

La operación de E-Plus se decidirá definitivamente a principios de 2014 cuando la filial alemana de Telefónica apruebe la compra en otra junta extraordinaria.

Portugal Telecom también se prepara para el futuro de la consolidación de operadoras europeas y ha anunciado el inicio de las conversaciones para fusionarse con la brasileña Oi en la que tienen ya el 23 %, con lo que refuerza su posición en el mundo.

Y en los mercados internacionales se unen las noticias de un viejo mito y uno nuevo: el Empire State Building salió a bolsa en Nueva York a un precio de unos 13 dólares por título, mientras que la red social Twitter prepara su salida con la que espera lograr mil millones de dólares.

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