Trichet, Grecia y España anuncian vientos de recuperación y confianza en Europa

  • Europa vive sus vacaciones con mejor sabor de boca. Ese enfermo llamado economía europea sigue grave, pero los primeros signos de recuperación llevan la confianza a los mercados y países más cuestionados.
lainformacion.com

El presidente de Banco Central Europeo, Jean Claude Trichet, lanzó el jueves un mensaje tranquilizador a los mercados: “Los datos económicos del segundo y del tercer trimestre en Europa han sido mejor de esperado”. Es decir, que el verano en el que se ha conocido el estado de salud de las grandes entidades financieras del continente está siendo bueno.

Un alivio que no encubre la dura realidad que, en palabras del propio Trichet, supone que la recuperación mostrará un ritmo “moderado e irregular”. Hay peros, aunque el escenario que hoy describe Trichet, marcado por un “entorno de incertidumbre”, lo hubiera firmado Europa hace apenas dos meses, cuando la Unión Europea tuvo que cortar de raíz las especulaciones sobre una posible intervención para rescatar la economía española.

El pasado jueves, el Tesoro español colocó 3.500 millones de euros en bonos a tres años un 30% más barato que en la subasta anterior. Es el resultado del progresivo abaratamiento de la deuda a corto y medio y de la relajación de la prima de riesgo de España tras la situación límite de la pasada primavera.

Por lo tanto, España recupera poco a poco las constantes vitales. Pero no está sola en el proceso. Grecia, convertida en el icono de la crisis de la que Europa intenta salir con sangre, sudor y lágrimas, ha recibido un gran espaldarazo de la Comisión Europea.

Tras su visita al país heleno, los expertos de Bruselas han calificado los esfuerzos de Grecia como “enérgicos e impresionantes”. De momento, el país que recibió ayudas de 110.000 millones de euros cumple con sus obligaciones.

No se trata de tirar cohetes, porque las condiciones iniciales de los programas de ajuste suelen ser relativamente fáciles de cumplir Conviene no olvidar que aún en el mejor de los escenarios, los niveles de deuda del país podrían situarse entre el 130% y el 140% entre 2012 y 2013.

Salvando las enormes distancias entre un país y otro, la economía española también debe prepararse para importantes ajustes. Después de mejorar su crecimiento trimestral hasta el 0,2% entre abril y junio –la subida fue del 0,1% en el primer tercio del año-, el Banco de España da una de cal y otras de arena en su último informe económico.Pero, por cantidad y calidad, ganan las primeras.

Según la institución, queda claro que las grandes cifras reflejan un tono “progresivamente menos desfavorable de la demanda nacional” y que todas las ramas de actividad han puesto de manifiesto un comportamiento “algo más favorable”, como el empleo.

En el otro lado de la balanza, Banco de España reclama “más medidas” al Gobierno si la realidad económica pone en peligro la estabilidad presupuestaria. Sombras y luces en un escenario que mejora poco a poco dentro y fuera de España.

Dos semanas después de las pruebas de estrés a la banca, que han sido calificadas como “amplias y rigurosas” por Trichet, el enfermo recupera el color con un la vista puesta en Estados Unidos. Como la semana no podía ser redonda, las malas cifras de paro en la primera economía del mundo conocidas el viernes rompieron la carrera alcista de las bolsas y cuestionan el ritmo de recuperación al otro lado del Atlántico.

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