Los sindicatos mayoritarios españoles -CCOO y UGT- no descartan convocar una huelga general tras su reunión de ayer con el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero. Si llega el caso, sería la primera en España desde el 20 de junio de 2002. Entonces, los sindicatos tomaron la calle para tumbar un real decreto cuyo objetivo era introducir recortes en la protección del desempleo.
Hace ocho años, el cuadro económico español estaba marcado por una ruptura en la reducción ininterrumpida que la tasa de paro había experimentado desde 1995 hasta 2001. En 2002, la tasa de desempleo creció desde el 10,5% hasta el 11,4% -11,2% en junio, el mes de la movilización-. Y el Producto Interior Bruto (PIB) aumentó a un ritmo del 2,7% -2,5% en junio- por encima del umbral del 2% que los expertos consideran imprescindible para que España genere empleo.
De hecho, las cifras de paro bajaron ligeramente en 2003. Esta foto fija de la economía española el día que, según el Gobierno, el 16% de los trabajadores siguió la convocatoria de los sindicatos, poco o nada tiene que ver con la actual. Hoy, la tasa de paro se sitúa en el 20,05% y la economía ha crecido en el primer trimestre un pobre 0,1% que, en cualquier caso, rompe seis trimestres consecutivos de caídas.
La huelga general del 20 de junio de 2002 ha sido la última en España desde que llegó la democracia. Pero su grado de seguimiento fue muy inferior a la histórica movilización del 14 de diciembre de 1998.
El precedente de 1998
Entonces, ocho millones de personas –el 90% de la población activa en aquel momento- se movilizaron contra la política económica del Gobierno liderado por Felipe González, cuyo ministro de Economía era Carlos Solchaga. Aunque el escenario era difícil, las cifras de empleo tampoco eran comparables con las actuales. De hecho, en 1998 el paro registrado descendió en algo más de 255.000 trabajadores y la tasa de paro sobre la población activa era del 18,8%.
Pero el ambiente estaba extraordinariamente crispado. Dos meses antes, Manuel Chaves–hoy tercer vicepresidente del Gobierno- había fracasado en su intento de consensuar una reforma laboral. Las negociaciones se rompieron.
Una situación que recuerda mucho a la actual. Casi tres años después del comienzo de la crisis, Gobierno, sindicatos y patronal no han conseguido llegar a un acuerdo, que el plan de ajuste presentado el miércoles por Rodríguez Zapatero puede entorpecer más todavía. De vuelta a la historia de las huelgas generales en España, hay que recordar la de enero de 1994 contra el decreto que, sobre todo, reformaba la cobertura del desempleo.
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que lainformacion.com restringirá la posibilidad de dejar comentarios