Una marcha de la CGTP pide al presidente portugués que vete los presupuestos

Lisboa, 15 dic.- La mayor central sindical lusa, la comunista CGTP, se manifestó hoy en Lisboa frente a la residencia oficial del presidente de Portugal, Aníbal Cavaco Silva, para exigir el veto a los duros presupuestos del Estado para 2013.

Centenares de personas participaron en la marcha, encabezada por el secretario general del sindicato, Arménio Carlos, y pidieron el fin de la política de recortes y subidas de impuestos del Gobierno conservador luso, que encabeza el primer ministro Pedro Passos Coelho.

Los manifestantes, que reclamaban también mayor atención a un desempleo situado ya en el 16 %, se congregaron ante el Palacio de Belem de la capital como medida de presión hacia Cavaco, que debe sancionar el presupuesto para que entre en vigor.

La mayoría absoluta de la alianza gobernante entre el Partido Social Demócrata (PSD, centroderecha) y los democristianos del CDS-PP aprobó a finales de noviembre el documento, a pesar de las voces divergentes dentro de ambas organizaciones que criticaron la dureza de los recortes y las subidas de impuestos que incluye.

Las principales organizaciones sindicales lusas y la oposición de izquierda, pidieron a Cavaco, del mismo partido que Passos Coelho, que haga uso de sus atribuciones y envíe el presupuesto al Tribunal Constitucional para que se revise su legalidad.

El presidente luso aún no se ha pronunciado al respecto, pero el semanario "Expresso" aseguró hoy que va a promulgar el texto y después lo enviará al TC.

Con esa doble decisión el presupuesto entraría en vigor a primeros de año, aunque podría ser cuestionado meses más tarde por una sentencia de la alta instancia judicial.

En su discurso al finalizar la manifestación, el líder de la CGTP criticó esa posible decisión presidencial y exigió a Cavaco que asumiendo su responsabilidad de salvaguardar la Constitución envíe al Tribunal, pero sin promulgarlo, el polémico presupuesto, cuya legalidad han cuestionado muchas voces, recordó.

"Si se confirma la promulgación, estaremos ante una posición que no respeta y no escucha al pueblo, porque la mayoría aplastante dice al Presidente de la República que no promulgue el Presupuesto", proclamó el sindicalista.

Los presupuestos de 2013 incluyen un "enorme" aumento de impuestos, en palabras del ministro luso de Finanzas, Vítor Gaspar, que elevará en un 30 por ciento la presión media sobre el ciudadano, según las estimaciones de los expertos.

El Gobierno luso espera que estas medidas, que se suman a otras drásticas subidas de impuestos y recortes en los últimos dos años, permitan a Portugal cumplir los compromisos del rescate financiero de 78.000 millones de euros que firmó el año pasado con la UE y el Fondo Monetario Internacional (FMI).

Entre las principales exigencias de ambos organismos a Lisboa está la reducción del déficit público hasta el 5 % del PIB antes de que acabe este año y al 4,5 % en 2013, un recorte que, según Passos Coelho, hace necesario "reformar" el Estado luso para reducir sus costes.