Barcelona, 4 mar.- Unas 800 personas de Flix (Tarragona), según fuentes de la Guardia Urbana, participan hoy en Barcelona en una protesta contra los 156 despidos anunciados por la química Ercros en la planta que tiene en esta población de las tierras del Ebro.
Los manifestantes se han concentrado a las puertas de la sede de Ercros en la capital catalana y han cortado durante unos veinte minutos el tramo central de la avenida Diagonal en ambos sentidos, así como un lateral de esta vía.
El secretario general de CCOO en las tierras del Ebro, Josep Casadó, ha elevado el número de concentrados al millar de personas, y ha precisado que 16 autocares partieron hoy desde Flix para ir a la protesta contra el ERE presentado por la química catalana, que afecta a 198 personas en toda España, aunque el grueso de los despidos se harán en Cataluña.
"Flix no vol morir" (Flix no quiere morir) o "Per una comarca de futur. No als acomiadaments" (Por una comarca de futuro. No a los despidos) son algunas de las pancartas que han exhibido los concentrados, que han lanzado bolsas de tierra a las puertas de la sede de Ercros donde han protestado porque la química "contamine" la zona y ahora deje sin empleo a numerosas familias.
El alcalde de Flix, Marc Mur, concejales del consistorio, vecinos de la población, representantes de asociaciones de Flix, diputados de las tierras del Ebro de diversos partidos catalanes e incluso vecinos de la localidad que viven en Barcelona se han unido a la protesta.
Los representantes de Flix pretenden alertar de que los despidos en la planta no solo afectan a 156 personas, sino que los sindicatos calculan que el impacto directo de esos despidos acabaría afectando, directa o indirectamente, a unas 250 o 300 familias de la población.
Por el momento, los representantes de la plantilla no han logrado reunirse con ningún responsable de la dirección de Ercros, aunque sí les recibirá el conseller de Empresa y Empleo, Felip Puig.
La Generalitat está muy preocupada por el impacto que pueden tener todos estos despidos en una población de unas 4.000 personas, y trata en vano desde hace semanas de mediar en el conflicto.
Ercros ha hecho oídos sordos a las demandas de la Generalitat de segregar la parte catalana de los despidos en otro ERE y ha trasladado la mesa de negociación del ERE a Madrid, dado que el ERE afecta a más de una comunidad.
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