El Dow Jones Industrial Average avanzó 47,24 puntos a 16.049,13 mientras que el Nasdaq perdió 26,65 puntos a 4.517,32 y acumuló seis sesiones consecutivas en baja, según los datos definitivos de la jornada.
El índice extendido S&P 500 ganó 0,12% a 1.884,09 puntos.
Tras la fuerte caída del lunes, cuando el Nasdaq pedió más de 3%, los índices oscilaron del rojo al verde en toda la sesión y terminaron en forma despareja.
"Al comienzo de la jornada hubo un rebote, tras una caída considerada excesiva, que pudo ser el inicio de un alza sostenida", resumió Sam Stovall de Standard and Poor's Capital IQ.
"Sin embargo hubo muchos inversores que apostaron a una caída del mercado y comenzaron a vender", continuó. "Incluso cuando tomaron conocimiento de que en setiembre mejoró la confianza de los consumidores, no le prestaron mayor atención a ese dato", afirmó.
Para los inversores los motivos de inquietud son difusos pero básicamente son el enlentecimiento de la economía de China, que puede pesar en el crecimiento mundial, y la incertidumbre sobre el calendario de la Reserva Federal para normalizar la tasa estadounidense de interés que hoy es de casi 0%.
Además "el riesgo de parálisis presupuestal del gobierno (estadounidense) sigue pesando en la confianza", dijeron analistas de la firma de corretaje Charles Schwab, aún cuando el conflicto entre el Congreso de mayoría republicana y el gobierno demócrata parece estar momentáneamente resuelto.
El mercado de obligaciones avanzó. Hacia las 20H30 GMT, el rendimiento de los bonos del Tesoro a 30 años bajaba a 2,055% contra 2,094% del lunes y el de los títulos a 30 años quedó en 2,859%, desde el 2,877% del día anterior.
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