Microsoft ha presentado este jueves sus resultados para los nueve primeros meses de su ejercicio 2024, que no sigue el calendario natural. En este periodo, el gigante tecnológico ha registrado un beneficio neto de 66.100 millones de dólares (unos 61.604 millones de euros). Esta cifra supone un crecimiento del 26% respecto al mismo periodo del ejercicio anterior, que la empresa ha logrado principalmente gracias al avance en Inteligencia Artificial (IA).
La empresa, que se mantiene como la mayor en EEUU por capitalización de mercado con unos 2,96 billones, alcanzó una facturación acumulada de 180.395 millones en los últimos tres trimestres, rozando un aumento interanual del 16%, según ha indicado la firma en un comunicado.
Satya Nadella, máximo ejecutivo de la compañía, señaló que Microsoft está "orquestando una nueva era de transformación" de la mano de Copilot, su 'chatbot' de IA, y las tecnologías asociadas a este sistema. Nadella recalca que, además de ayudar a avanzar en este campo, el desarrollo de IA contribuye a mejorar los resultados en negocios de todo tipo.
Gana más de 20.000 millones en un trimestre
En el trimestre más reciente, acabado el 31 de marzo, la tecnológica tuvo un beneficio de 21.939 millones de dólares (casi un 20% más) y una facturación de 61.858 millones (un 17% más), cifras en las que tuvo gran importancia su servicio de la nube, Microsoft Cloud.
Según indicó la jefa financiera de la firma, Amy Hood, el segmento de Microsoft Cloud supuso más de la mitad de los ingresos y creció un 23% interanual en el trimestre, hasta 35.100 millones, mientras que los servicios relacionados de Azure -sin cifras absolutas- crecieron un 24%.
El segmento de productividad y procesos de negocio, que engloba los productos de Microsoft Office para uso personal y de empresas, o la red social LinkedIn, ingresó 19.600 millones (un 12% más) y el segmento de computación, en tercer lugar, ingresó 15.600 millones (un 17% más).
La única sombra fue una caída en la facturación de los dispositivos de computación de Microsoft, que contrastó con una fuerte subida del 62% en la de los contenidos de la videoconsola Xbox, coincidiendo con la reciente compra del desarrollador de videojuegos Activision Blizzard.
Los datos, publicados al cierre de Wall Street, tuvieron una buena acogida inicial entre los inversores, ya que superaron las expectativas, y las acciones subían un 4% en las operaciones electrónicas.
