Coches capaces de sentir al conductor, de detectar las miradas, los latidos, de adaptar iluminación y temperatura a sus gustos de forma autónoma, de sugerir rutas, y hasta de sugerir proactivamente restaurantes…, capaces de "adivinar" qué están mirando los pasajeros en el exterior del vehículo y mostrarles la información al instante…. parecen de película de ciencia ficción, pero son tecnologías que, si bien aún no han llegado al coche que circula hoy por la calle, son una realidad desde el punto de vista técnico y potencialmente comercializables.
Marcas de coches tan reales como Audi, BMW, Mercedes u Honda acaban de presentar sus tecnologías más novedosas asociadas al automóvil, como el caso del AI:ME, un concepto de vehículo sobre el que la firma de los cuatro aros ha equipado sus últimas propuestas tecnológicas para darlas a conocer en el Salón de Electrónica de Consumo (CES). Este vehículo incorpora tecnología de Inteligencia Artificial (proyecto Audi Intelligence Experience) que, más allá de la conducción autónoma, permite que el vehículo interactúe con los pasajeros de forma empática y configure el clima y la luz a su gusto, proponga rutas, ofrezca información a través de pantallas OLED tridimensionales y mediante control ocular. En el caso del conductor, además, incorpora una pantalla tipo head-up display que, desarrollada con Samsung, muestra la información en 3D y permite que el ojo no tenga que reenfocar, lo que aumenta la seguridad.
Las últimas innovaciones de la alemana BMW se centraron sobre todo en el confort del pasajero en el interior del vehículo, con tecnologías que también monitorizan el movimiento de los ojos y es capaz de ofrecer información en tiempo real sobre lo que están mirando fuera del vehículo gracias a la Inteligencia Artificial. La marca también anunció su intención de ser el primer fabricante de vehículos Premium en el mundo en ofrecer un vehículo de producción con capacidad 5G, que equipara su iNEXT que espera lanzar el próximo año.
También las marcas de lujo dan su protagonismo a la sostenibilidad. En su modelo i3 Urban Suite, BMW destaca materiales como la botonera libre de cromo, empleo de maderas con proveedores certificados y materiales reciclados (textiles, tapetes…). Pero sin duda el vehículo más sorprendente en ecología es el Fisker Ocean, según la marca el vehículo más sostenible del mundo, incluso en su proceso de producción (reduciendo y compensando el CO2 generado en los procesos de fabricación). De hecho, la firma destaca aspectos como el panel solar del techo para mejorar la autonomía, el textil formado por materiales reciclados, interiores "veganos" y paneles también con poliéster reciclado. Se trata de un vehículo eléctrico de 4,62 metros, con una autonomía estimada de unos 480 km, cuya salida al mercado está prevista para el año 2022.
Otras marcas, como Honda, trabajan en tecnologías que, más allá de la conducción autónoma, facilitan la transición entre los modos de conducción actuales y esta última. Su denominado Augmented Driving Concept es un vehículo cuyo volante tiene unas características muy especiales, que permiten controlas los 8 modos de conducción configurables, de modo que el sistema está siempre listo para una conducción autónoma, pero es el usuario quien decide en cada momento el grado de autonomía del sistema, por ejemplo: tocando dos veces el volante el vehículo inicia la ruta, empujándolo acelera y, tirando de él, disminuye la velocidad. Gracias a diversos sensores, el sistema es capaz de reconocer qué grado de intervención desea el conductor y se adapta en cada momento.
Más allá de las marcas de automóviles y algunas otras tecnológicas que hacen "incursiones" en el mundo de la movilidad (como el coche autónomo de Google) está la japonesa Sony, que presentó recientenemente su primera propuesta de vehículo conectado en el que monta nuevas tecnologías. Así, acaba de presentar su propuesta, el Vision-S, un vehículo eléctrico con tracción total, tecnológicamente avanzado, que equipa hasta 33 sensores para reconocer a las personas dentro del vehíuclo y fuera de él en 360 grados. Este modelo incorpora Inteligencia artificial, tecnología de telecomunicaciones y servicios en la nube marca de la casa para una conducción asistida e “infotenimiento” (información + entretenimiento) a bordo.
También llegan novedosos sistemas y accesorios que mejoran la visibilidad, como es el caso del curioso parasol "digital" de la alemana Bosch. Se trata de un dispositivo basado el parasol tradicional (la visera con la que tapamos el sol cuando nos da directamente en los ojos) pero con una pantalla LCD transparente. Mediante el uso de la Inteligencia Artificial procesa la información de una cámara de observación del conductor, y es capaz de oscurecer una zona concreta del parasol para así generar sombra, de forma dinámica, únicamente en la zona de los ojos del conductor. Es previsible que estas nuevas propuestas tecnológicas, técnicamente funcionales, puedan llegar al mercado más pronto que tarde.
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