FEDEA ADVIERTE DE QUE EL SISTEMA FISCAL ESPAÑOL TIENE “MUCHOS AGUJEROS” Y ES “MEJORABLE”

La Fundación de Estudios de Economía Aplicada (Fedea) considera que el sistema tributario español tiene aspectos “claramente mejorables” y advierte de que tiene “muchos agujeros”, por lo que recomienda una reforma que permita hacerlo “más eficiente y más justo”, según afirmó este martes su director ejecutivo, Ángel de la Fuente.
En concreto, durante la de prensa durante la presentación del ‘Observatorio sobre el reparto de los impuestos entre los hogares españoles’, De la Fuente planteó la posibilidad de realizar una reforma del sistema fiscal “de forma que sea más eficiente y que sea lo más justo posible”.
En este sentido, el responsable de Fedea afirmó que el actual sistema “tiene muchos agujeros”, con tipos “en principio muy altos” pero con bases “que se escapan" y que, por lo tanto, "tendrían que ser que ampliadas”.
También señaló otras cuestiones a considerar, como son las cotizaciones sociales de los autónomos, “ya que seguramente no es muy lógico que sigan pagando cuando tienen pérdidas”.
En definitiva, para De la Fuente, el sistema español de impuestos “es claramente mejorable” y para reformarlo se debería tener en cuenta varios aspectos "que no tienen que estar ligados necesariamente a la cuestión de la redistribución del reparto de impuestos".
IMPACTO REDISTRIBUTIVO
Respecto al contenido del observatorio, en el mismo se recoge que el conjunto de los impuestos principales que se aplican en España “reduce la desigualdad de la renta bruta, medida por el índice de Gini, en un 2,82%”.
Sin embargo, mientras que las cotizaciones sociales y los impuestos indirectos, como el IVA, se comportan de forma regresiva, aplicando una mayor presión fiscal en las rentas más bajas en comparación con las rentas más altas, los impuestos directos, entre los que se incluye el IRPF, son progresivos y permiten reducir en un 6,83% la desigualdad en la distribución de la renta bruta de los hogares españoles. En el caso de los indirectos, estos aumentan la desigualdad en un 4,02%.
No obstante, desde la asociación se concluye que la redistribución mediante impuestos “no representa más que una parte muy pequeña del efecto redistributivo logrado por intervención pública a través de flujos monetarios”. En cambio, la mayor parte de la política redistributiva se lleva a cabo con prestaciones económicas (pensiones, prestaciones por desempleo o enfermedad, becas y ayudas para estudios) que reducen la desigualdad de la renta primaria en torno a un 30%.