Las autoridades armenias intentaban negociar el martes con el grupo de hombres armados que ocupó hace dos días un edificio policial en la capital Ereván, donde seguían retenidos cuatro agentes, informaron fuentes policiales.
"Estamos manteniendo negociaciones con los secuestradores. Hacemos todo lo posible para solucionar esta situación sin derramar sangre", declaró a la AFP el subjefe de la policía armenia, Hunan Pogosyan.
Policías equipados con chalecos antibalas y cascos vigilaban el martes el edificio mientras camiones aparcados en las calles de los alrededores bloqueaban el acceso, según un fotógrafo de la AFP.
Los secuestradores, que se apoderaron de un gran arsenal de la policía, rechazaron rendirse.
En el ataque del domingo murió un agente y otros dos resultaron heridos. Dos rehenes fueron liberados ese mismo día y otros dos el lunes.
Sin embargo el martes por la mañana todavía seguían retenidas cuatro personas, dijo el servicio nacional de seguridad de Armenia.
Entre los rehenes figuran dos altos mandos, el subcomisario de la policía nacional Vardan Egiazaryan y el subjefe de la policía de Ereván, Valeri Osipyan.
El grupo pide la dimisión del presidente Serzh Sargsian y la liberación de Zhirair Sefilian, un opositor arrestado el mes pasado.
Más de 1.500 personas, opuestas al gobierno, se manifestaron el lunes en Ereván pidiendo un solución pacífica a la situación.
El presidente Sargsian, exmilitar, fue elegido en 2008 y su elección, cuestionada por la oposición, provocó un brote de violencia que dejó 10 muertos.
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