CATALUÑA. EL JUEZ MARCHENA ADVIERTE A HOMS: “ESTO NO ES SU CASA, ESTO ES EL TRIBUNAL SUPREMO”

- El exconseller se enfrenta a nueve años de inhabilitación. El juez Manuel Marchena, presidente de la Sala del Tribunal Supremo que juzga al exconseller de Presidencia de la Generalitat catalana Francesc Homs por la organización del 9-N, advirtió hoy al acusado en los primeros compases del interrogatorio del fiscal que “esto no es su casa, esto es el Tribunal Supremo”, en respuesta a las quejas por las interrupciones del ministerio público.
Homs se quejó de que el fiscal le formulara nuevas preguntas cuando aún no había acabado de contestar la anterior. "En mi casa me enseñaron que tenía uno que dejar que el otro acabara de hablar antes de empezar él. Y me gustaría que se me tratara con respeto", dijo ante el tribunal.
El presidente del tribunal le respondió entonces: "Esto no es su casa, esto es el Tribunal Supremo" y "la pertinencia de hacer las preguntas corresponde a la Sala. Si usted considera que el fiscal le interrumpe, usted siga hablando. No va a tener ninguna cortapisa para expresar todo lo que crea oportuno en el ejercicio de su defensa”, le garantizó.
Marchena insistió en asegurar al exconsejero que “no dude de que la Sala está deseando conocer todas sus explicaciones", tras lo cual pidió al fiscal que permita al acusado terminar sus argumentos antes de plantearle una nueva pregunta.
Francesc Homs dijo que conocía la providencia de prohibición del Tribunal Constitucional del 4 de noviembre, que suspendía los actos impugnados de la consulta del 9-N, “como todo el mundo, a través de los medios de comunicación”, y ratificó que no recibió “ninguna notificación personal hasta un año después".
Preguntado por la participación de voluntarios en la organización del 9-N, dijo que “participaron en muchos de los ámbitos de la organización, en función de distintas categorías de responsabilidad", pero admitió que en todo lo relativo a la creación de bases de datos, compra de ordenadores o instalación de sistemas informáticos la responsabilidad fue de las empresas que la Generalitat contrató a tal efecto.
En relación a la compra de los 7.000 portátiles que se usaron en la jornada, dijo que no se compraron expresamente para la ocasión, sino que "se adquirieron para finalidades educativas y así están operando hoy en día, aunque en un momento puntual pudieran servir en el proceso participativo".
El fiscal Jaime Moreno interrogó a Homs sobre la contratación del Pabellón Italia de Fira de Barcelona, que fue usado como centro de datos de la consulta. El exconsejero explicó que "cuando constatamos que había una acreditación tan elevada de periodistas, vimos que el Govern no disponía de un espacio para albergar tal cantidad de personas, unos 800 periodistas, por lo que nos dirigimos a Fira de Barcelona para consultar la posibilidad de que pudiéramos acceder al alquiler de un espacio".