Se les acusa de vender droga al menudeo y los agentes se incautaron de 1.025 gramos de marihuana, más de 300 euros en metálico, balanzas de precisión, humificadores, transformadores, lámparas halógenas y diferentes enseres para la preparación y distribución de las sustancias estupefacientes.
La investigación, según ha informado la Policía Nacional, comenzó tras recibir varias denuncias anónimas en las que se relataban que en el domicilio registrado acudían muchas personas, especialmente jóvenes, para comprar droga, incluso se había observado a altas horas de la madrugada como cortaban lo que al parecer era droga encima de una mesa.
Contrastada la información recibida se estableció un dispositivo en las inmediaciones, realizándose las comprobaciones necesarias a fin de determinar la presunta actividad delictiva llevada a cabo por los detenidos.
En las vigilancias establecidas, los agentes constataron un gran trasiego de personas que se aproximaban a la vivienda. Los agentes siguieron a cada uno de los consumidores abordándoles a una distancia prudencial para incautarles la droga adquirida. Además se detectó a varios individuos que a bordo de un turismo realizaban tareas de vigilancia con el fin de detectar la vigilancia policial.
Tras obtener la autorización judicial, los investigadores establecieron un dispositivo para llevar a cabo la entrada y registro en el domicilio de los detenidos. Al acceder a la vivienda, uno de los arrestados, menor de edad, saltó desde la terraza al tejado de la vivienda colindante arrojando una bolsa de plástico que contenía la mayor cantidad de la sustancia estupefaciente intervenida, encontrando por toda la casa dosis ya preparadas para su venta.
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