El miedo de los dirigentes del PDeCAT a perder su patrimonio fractura el Govern

El cese del conseller de Empresa del Gobierno catalán, Jordi Baiget, por dudar de la celebración del referéndum ha provocado un terremoto en el PDeCAT. En privado, son varios los dirigentes de la antigua Convergència que consideran que el proceso independentista no va por buen camino. En público, las voces discordantes van a más: además de Baiget, la presidenta de la Diputación de Barcelona y del Consejo Nacional del partido, Mercè Conesa, se ha sumado a las críticas afirmando que nadie sabe "dónde llevará el proceso soberanista" y reconociendo que quizá se trate de "un callejón sin salida". Son las primeras fisuras en el ejecutivo autonómico a falta de algo más de dos meses y medio para el 1 de octubre.

El ambiente en el PDeCAT es, en este momento, de revuelo, según explican veteranos de la formación. Destacados miembros del partido que forma parte de la coalición en el Gobierno albergan serias dudas sobre la deriva independentista a la que les están impulsando ERC y la CUP.

Creen que no va a acabar bien. Es más, consideran que ocurrirá todo lo contrario y que los dirigentes políticos que secunden el órdago a la legalidad se enfrentarán a denuncias en los tribunales y posibles condenas, según las mismas fuentes.

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El principal temor que verbalizan estos dirigentes del PDeCAT es la posibilidad de que una condena por malversación provoque que se les embargue el patrimonio personal. Opinan lo mismo que el cesado Baiget: "¿Ir a la cárcel? Yo podría aguantar tener que ir a la cárcel, pero no si van contra el patrimonio: pensemos en la familia... nuestras decisiones pueden afectar a nuestra gente", afirmó.

Entre estos dirigentes del PDeCAT temerosos de perder su patrimonio se encuentran altos cargos de la Generalitat que pertenecen a la vieja guardia del partido y que no ven con buenos ojos el "choque de trenes" contra el Estado. Se habla, incluso, de algún consejero que podría tomar la decisión de dimitir en las próximas semanas, lo que provocaría, a su modo de ver, que el proceso independentista entrara en "riesgo de descarrilamiento". El patrimonio de los consejeros

Los consejeros de la Generalitat cuentan con patrimonios de diferentes cuantías, según se puede consultar en el portal de transparencia autonómico. En lo referente a los representantes del PDeCAT, en lo alto de la tabla se sitúa el responsable de Territorio y Sostenibilidad, Josep Rull, que cuenta con 919.735,39 euros y un pasivo de 13.200 euros.

Le sigue el conseller de Interior, Jordi Jané, con 835.039,16 euros y un pasivo de casi 85.000 euros, y el propio Carles Puigdemont, con activos de 294.000 euros y un pasivo de 126.286 euros. Meritxell Ruiz (de Educación) roza los 200.000 euros, Santi Vila (de Empresa) tiene un pasivo mayor, 196.368 euros, que sus activos, 147.230 euros; y Neus Munté (de Presidencia) cuenta con 128.046 euros de patrimonio.