En una entrevista en RNE, recogida por Europa Press, el ministro ha explicado que sólo hay dos posibilidades reales para evitar nuevas elecciones y que éstas son "una gran coalición o un pacto a la portuguesa" --de partidos de izquierda--, pero que éste sería mucho más complicado porque PSOE y Podemos están "luchando por la hegemonía de la izquierda" y necesitarían también la unión del PNV, ERC y CDC.
Por eso, cree que en las negociaciones de investidura hay "muchísimo postureo" y que los españoles "ya empiezan a estar un poco cansados" de la situación política, porque lo que quieren es que haya Gobierno.
Además, ha avisado de que no puede haber "desconexión absoluta" con la realidad de las obligaciones con Bruselas, y ha recordado el caso de Syriza en Grecia, que generó unas expectativas que se vieron "defraudadas" y causó una tensión con unas "consecuencias económicas graves".
"A veces yo creo que la sociedad es mucho más inteligente de lo que nos creemos y mucho más madura, pues sabe que esas promesas no se van a poder cumplir", ha señalado.
"ORGULLOSÍSIMO" DEL GOBIERNO
Frente al caso de Grecia, ha puesto en valor el trabajo de Mariano Rajoy para evitar el rescate de España. De hecho, también ha dejado claro que se siente "orgullosísimo" de haber formado parte de su Gobierno.
"Piensen ustedes lo que hubiera sido con todos los problemas que tenía este país territoriales, institucionales, de corrupción, que a nosotros nos hubieran intervenido, que hubiésemos perdido la autonomía desde el punto de vista de política económica, hubiese sido terrorífico y eso se evitó por una decisión explícita del presidente Rajoy y yo creo que los españoles sí se lo han tenido en cuenta porque ganó las elecciones".
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