Bruselas.- Los colegios electorales están abiertos desde primera hora de la mañana en la mayor parte de los municipios holandeses, donde hoy se elegirá a sus regidores en unos comicios marcados por la reciente caída del Gobierno de coalición que presidía Jan Peter Balkenende.
Las votaciones se desarrollan desde las 6:00 horas GMT y hasta las 20:00 GMT y, según medios y expertos, se espera una participación seguramente por debajo del 60 por ciento, tal y como ocurrió en las tres elecciones municipales anteriores.
En esta ocasión, sin embargo, los asuntos locales han quedado desplazados en beneficio de la política nacional y las elecciones se viven en parte como un adelanto de las generales que se celebrarán el 9 de junio, tras la caída del Ejecutivo por su división sobre la presencia militar en Afganistán.
Hasta ahora, los sondeos auguran una subida de la derecha radical, en concreto del Partido para la Libertad (PVV) del populista y antimusulmán Geert Wilders, que ya registró un importante avance en las elecciones europeas de junio cuando fue el segundo partido más votado de los Países Bajos, después de los democristianos (CDA).
La lista de Wilders sólo se presenta en las localidades de La Haya y Almere, pero las encuestas vaticinan un fuerte apoyo, especialmente en la segunda, donde podría obtener un 30 por ciento de los votos.
Wilders ha prometido que si gana, su formación prohibirá que en las dependencias municipales y en las entidades que reciban fondos locales se vista el velo musulmán.
Mientras, los grandes perjudicados serán en principio los democristianos del primer ministro en funciones Balkenende, después de cuatro experiencias en las que no ha podido llevar a su Gobierno hasta el final de la legislatura.
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