Al Bachir trata de impulsar con primer ministro etíope los acuerdos con Yuba

Jartum, 26 dic.- El presidente sudanés, Omar al Bachir, se entrevistó hoy con el primer ministro etíope, Hailemariam Desalegn, para poner en marcha los acuerdos firmados hace tres meses entre Jartún y Yuba, informó a Efe una fuente gubernamental sudanesa.

La fuente explicó que las conversaciones entre Al Bachir y Desalegn se centraron en acercar los puntos de vista entre Sudán y Sudán del Sur sobre los asuntos pendientes.

Está previsto que el primer ministro etíope se dirige mañana, jueves, a Yuba, para continuar con sus esfuerzos hacia un consenso entre ambos países, que deben reanudar sus conversaciones el próximo 13 de enero.

Por su parte, el ministro sudanés de Estado de Exteriores, Salah Wansi, dijo en declaraciones a los periodistas que en la reunión se trató el papel que desempeña Etiopía para apoyar la paz en la zona, como el despliegue de sus fuerzas en la zona en disputa de Abyei.

Mientras, el ministro de Información sursudanés, Bernaba Benjamin, destacó a Efe que a Yuba le interesan todas las iniciativas que traten de poner fin a los conflictos con Jartum.

Benjamin afirmó que Sudán del Sur está dispuesto a cumplir con todos los acuerdos firmados entre ambas partes.

Jartum y Yuba suscribieron un acuerdo el 27 de septiembre pasado en Adis Abeba para resolver los problemas pendientes entre ambos países, pero el cumplimiento del pacto se ha ido retrasando.

El pasado 19 de diciembre, las autoridades de Jartum anunciaron que los Ejércitos de Sudán y de Sudán del Sur se iban a retirar de "forma inmediata" de las áreas fronterizas en disputa como primer paso para establecer una zona desmilitarizada.

En una rueda de prensa en Jartum, el ministro sudanés de Defensa, Abdelrahim Mohamed Husein, aseguró que la última ronda de negociaciones entre Sudán y Sudán del Sur, que clausuró en Adis Abeba el 18 de diciembre, fue un gran paso hacia la activación de los acuerdos de seguridad entre las dos partes.

Tanto Sudán como Sudán del Sur mantienen disputas por la soberanía de algunos territorios fronterizos y se acusan mutuamente de respaldar a grupos rebeldes contrarios a sus gobiernos.