(ampliación) bildu. Rubalcaba tacha de “auténtica insidia” que el gobierno supiera de antemano o influyera en la sentencia del tc

El vicepresidente primero del Gobierno, Alfredo Pérez Rubalcaba, expresó hoy un “desmentido rotundo” de cualquier contacto directo o indirecto del Ejecutivo sobre los magistrados del TC que dieron luz verde a las listas de Bildu, de tal forma que calificó de “auténtica insidia” que se diga que influyó sobre la sentencia o que conocía de antemano cuál iba a ser ésta.
Rubalcaba se expresó con esta vehemencia en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, al hilo de las interpretaciones de que la sentencia del TC que enmendó la anterior del Supremo ha sido de naturaleza política y tiene su causa en la mayoría de magistrasdos nombrados a propuesta del PSOE que existe en el Pleno del primero de ambos tribunales.
Por lo demás, el vicepresidente insistió en la posición del Gobierno, ya expresada anoche por el ministro de Justicia, Francisco Caamaño, de “acatar y respetar” la sentencia del TC, como antes dijo de la del Supremo. Según Rubalcaba, el Estado de Derecho tiene unas reglas” y “cada institución juega su papel”. En este caso concreto, Rubalcaba atestiguó que “todas las instituciones implicadas” (la policía, la Abogacía y la Fiscalía General del Estado, el Supremo y el Constitucional) “han hecho su trabajo y han hecho su trabajo correctamente”.
Rubalcaba restó importancia al hecho de que el TC haya rectificado la sentencia del TS sobre el mismo tema, pues el hecho de que un tribunal que tiene competencia para ello revise la decisión de una instancia anterior “es el funcionamiento normal del Estado de Derecho”. “Ése es el Estado de Derecho”, insistió poco después, recordando que, aunque muchas veces coincidan, el Constitucional ya enmendó la sentencia del Supremo contraria a la candidatura de Iniciativa Internacionalista a las pasadas elecciones europeas.
Una vez se ha pronunciado el TC, a quien el Estado de Derecho otorga “la última palabra”, el vicepresidente recomendó: “Lo razonable es que los demócratas acatemos y respetemos el Estado de Derecho. Eso es lo que nos distingue a los demócratas”. Según precisó, respetar el Estado de Derecho “quiere decir respetarlo siempre, a todas las instituciones que lo componen y en todas las circunstancias en las que debe funcionar”.
"ACABAREMOS CON ETA"
Rubalcaba aportó para ello un argumento adicional al estrictamente legalista: “Hemos llegado hasta aquí de la mano del Estado de Derecho. Aplicando con rigor sus instrumentos estamos viendo el principio del fin de ETA, y confío en que de la mano del Estado de Derecho acabaremos con la banda terrorista”.
El vicepresidente rehusó entrar en consideraciones políticas, aunque sí dijo irónicamente que agradecía al PP que “recuerde que tenemos que cumplir las leyes que el propio Gobierno ha impulsado”, en referencia a la Loreg.
La última reforma de la Ley Electoral faculta al Gobierno para impugnar una lista electoral en plena campaña electoral o incluso retirar el acta a un concejal electo por “ilegalidad sobrevenida” si se descubre que el partido con el que concurrió a los comicios tiene vínculos con el terrorismo o si no condena la violencia. “El Gobierno va a seguir aplicando la ley”, garantizó, puntualizando que “la Loreg dice lo que dice porque el Gobierno lo quiso”.
Rubalcaba aseguró que “no ha cambiado” su “tranquilidad” en relación al mantenimiento del apoyo parlamentario del PNV al Gobierno, que los nacionalistas dijeron que suspendían tras la sentencia del Supremo sobre Bildu, y que tampoco ha oído a ningún responsable del PSE o del PP vasco “poner en riesgo o en tela de juicio su pacto”.
En esa línea, insistió en que esta fase final de ETA requiere “unidad, unidad, unidad” entre los demócratas, un objetivo que asumió como su “obligación” y que debe permitir que, aunque haya “opiniones y sentimientos distintos”, se reconozca como “muy importante que todos respetemos las mismas reglas”.