Andalucía. Frustración interna en el pp por la falta de reacción de rajoy


La derrota del PP en las elecciones al Parlamento de Andalucía, con la pérdida de 17 diputados, y la reacción del presidente del Gobierno y del PP, Mariano Rajoy, ante estos resultados ha generado un ambiente de "frustración" en las filas populares posterior al "shock" inicial que supuso ver cómo su representación parlamentaria se reducía de 50 a 33 diputados.
Según fuentes populares consultadas por Servimedia, el nerviosismo se ha instalado en el PP la semana después de los comicios andaluces no sólo porque el resultado obtenido por Juan Manuel Moreno superó los peores pronósticos, sino porque han sorprendido la reacción ante estos resultados de Rajoy, del resto de la dirección del PP y, también, de otros miembros del Gobierno.
Desde las filas del PP aseguran que no entienden por qué Rajoy no lanzó a los suyos y a los ciudadanos un mensaje de autocrítica de puertas para fuera en un contexto político marcado, además, por la fuerte irrupción de Ciudadanos en el Parlamento andaluz, donde consiguió nueve diputados.
En el PP coinciden en señalar la particularidad de Andalucía en términos electorales, pero no dudan en reconocer que el hecho de que se perdieran una tercera parte de los votos el domingo (pasando de 1,5 a 1 millón de respaldos) genera "temor" entre los diputados populares y, también, entre cargos autonómicos y locales.
Muchos son conscientes de que se pueden quedar "fuera" en las próximas citas electorales de este año y, por ese motivo, y ante la posibilidad de que Ciudadanos siga "creciendo" en los próximos meses, muestran su malestar porque Rajoy no haya reaccionado de forma más tajante después del 22-M.
Reconocen que la respuesta del presidente del PP este lunes en el Comité Ejecutivo Nacional fue insuficiente porque, lejos de reconocer el castigo al Gobierno y al PP, los populares se agarraron a una mejora de voto en relación a las elecciones al Parlamento Europeo de mayo de 2014 y al hecho de que Ciudadanos hizo daño en las urnas, principalmente, a UPyD y no al PP.
Desde la dirección nacional, admiten que la autocrítica real llegó en el círculo más cercano de Rajoy pero, reconocen, que el presidente del PP, cada vez más, evita mandar determinados mensajes que marquen la estrategia electoral en el Comité Ejecutivo por las posteriores filtraciones.
Rajoy insistió ante los suyos en que el resultado de las andaluzas no es "extrapolable" a los comicios autonómicos y locales del próximo 24 de mayo y, tampoco, a las elecciones generales previstas para final de año.
Las fuentes consultadas consideran que desde el Gobierno tampoco se ha hecho un análisis que pueda trasladarse a la opinión pública de que el PP ha captado el mensaje lanzado por las urnas.
El secretario de Estado de Relaciones con las Cortes, José Luis Ayllón, reconoció el lunes como "evidente" que el PP obtuvo un mal resultado y admitió que “gobernar mancha”. Sin embargo, también pidió no leer el 22-M "en clave nacional" y defendió que "no cambiará su hoja de ruta". La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, evitó el viernes realizar cualquier tipo de autocrítica.
En una semana marcada por el accidente áereo del Airbus 320 en los Alpes franceses, en el PP reconocen que el análisis de las elecciones andaluzas ha pasado a un segundo plano, como también lo ha hecho el auto del juez de la Audiencia Nacional Pablo Ruz que considera que ha quedado acreditada la existencia de la 'caja B' del PP, "de forma sistemática" entre 1990 y 2008.
Sin embargo, en el análisis de los populares consultados no se pasa por alto el hecho de que, en un contexto económico de mejora de los resultados tras siete años de crisis económica, la corrupción es lo que ha pasado factura al PP en su primera cita electoral del año.
En este sentido, hay quien defiende que, una vez se publique la sentencia por los llamados 'papeles de Bárcenas', sería necesario que se asumieran responsabilidades políticas de primer nivel.

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