Tras ocho años de gestión, la presidenta Cristina Kirchner mantiene una imagen positiva alta pero no puede aspirar un tercer mandato por lo que que entregará el gobierno el 10 de diciembre a quien surja de los comicios del 25 de octubre.
No obstante, la mayoría de los sondeos preanuncian hasta ahora que será necesaria una segunda vuelta electoral, prevista para el 22 de noviembre. Sólo una última encuesta este viernes muestra a un Scioli alejándose de a poco de sus competidores y ubicado a 12 puntos del segundo, el conservador Mauricio Macri, con lo que evitaría el balotaje.
En Argentina, un candidato presidencial gana en primera vuelta si obtiene más de 45% de los votos, o si supera 40% pero le saca 10 puntos de diferencia al segundo.
La última encuesta del Centro de Estudios de Opinión Pública (CEOP) divulgada el viernes por el diario Página/12 le otorga a Scioli 41,6% de los votos, seguido de Macri (29,1%) y en tercer lugar se ubica Sergio Massa (20,2%), un exkirchnerista devenido opositor de centroderecha.
Otras cuatro encuestas publicadas el fin de semana pasado coincidieron en considerar favorito a Scioli pero en ningún caso superaba el piso de 45%, y estimaron que el resultado definitivo dependerá del comportamiento de los indecisos.
El CEOP midió también la imagen de los candidatos, mientras que la presidenta Kirchner divide aguas entre un 50,3% de imagen positiva y un 46,6% de negativa al término de dos mandatos, de acuerdo a este sondeo.
Scioli, actual gobernador de la provincia de Buenos Aires, el mayor distrito con casi 40% del padrón, tiene 49,6% de imagen positiva mientras 47,2% lo rechaza, mientras que Macri es bien visto por el 43,2% del electorado pero exhibe 54,8% de imagen negativa.
En un sorpresivo cambio de rumbo, Scioli desistió de participar de un debate entre los seis presidenciables anunciado con bombos y platillos para el domingo próximo en la Universidad de Buenos Aires, organizado por Argentina Debate, una iniciativa que reúne líderes sociales y personalidades políticas.
La decisión de campaña de Scioli fue duramente criticada por sus contrincantes, que perderán la ocasión de hacer trastabillar al principal candidato.
"Voy a debatir con Scioli, si no es ahora, será en la segunda vuelta. No se va a poder seguir escondiendo", desafió este viernes Macri, alcalde de Buenos Aires, dando por seguro que habrá balotaje.
Massa lamentó que "la palabra de Scioli no valga nada" porque se había comprometido a debatir y expresó su temor que Macri también desista aunque hasta ahora prometió presentarse.
ls/hov
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