Roma, 14 sep.- La Policía italiana ha detenido a dos personas en Turín (norte de Italia) relacionadas con la Federación Anarquista Informal (FAI) acusadas de participar en el atentado en el que resultó herido el consejero delegado del grupo Ansaldo Nucleare, Roberto Adinolfi, en mayo pasado en Génova (noroeste).
Se trata de Alfredo Cospito y Nicola Gay, residentes en Turín y con antecedentes de terrorismo dentro de otra investigación, según explicó hoy la Fiscalía de Génova, encargada de seguir el caso, que precisó que ambos están considerados cercanos al entorno de la FAI.
En un comunicado conjunto, la Policía y los Carabineros indicaron que las detenciones se produjeron anoche y que los dos sospechosos tenían intención de abandonar el país en las próximas horas.
Ambos están acusados de los delitos de atentado contra la integridad personal con finalidad de terrorismo, lesiones graves y robo.
Las detenciones han sido posibles después de que Cospito y Gay fueran identificados en una grabación de una cámara de seguridad que captó el momento en el que abandonaban la moto que utilizaron en el atentado y tras lo que se quitaron el casco.
Los investigadores creen que los dos detenidos actuaron solos y por iniciativa propia, con independencia de su pertenencia al grupo anarquista.
Adinolfi, consejero delegado del grupo Ansaldo Nuclear, fue alcanzado por una bala en una pierna que le disparó una persona cuando salía de su casa el pasado 7 de mayo.
La Federación Anarquista Informal (FAI) - Célula Olga reivindicó el 11 de mayo el atentado con un comunicado enviado por correo ordinario a la redacción de Milán del diario "Corriere della Sera" escrita en un panfleto y con un matasellos que indicaba que el sobre fue enviado desde Génova.
En la reivindicación, la llamada la célula Olga de la FAI anunciaba nuevos atentados contra el grupo Finmeccanica, al que pertenece Ansaldo y acusaba a esa sociedad de "muerte y explotación y de la nueva frontera del capitalismo.
La FAI también se atribuyó el pasado diciembre el envío del paquete bomba en Roma al director general de la entidad pública de recaudación de impuestos Equitalia, Marco Cuccagna, cuya deflagración le causó heridas en la cara y en la mano.
Unos días antes también envió una "carta bomba" al presidente del Deutsche Bank, Josef Ackermann, en Fráncfort (Alemania), que no llegó a explotar, así como el envío el 23 de diciembre de 2010 de sendos paquetes bombas a las embajadas de Chile y Suiza en Roma, que causaron dos heridos.
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que lainformacion.com restringirá la posibilidad de dejar comentarios