Aznalcóllar, el desastre natural que fue cien veces mayor que el Prestige

Aznalcóllar es la mina cuya rotura de la presa de la balsa ocasionó los vertidos al río Guadiamar, principal afluente de Doñana y que ocasionó el desastre ecológico que asoló al ecosistema de esta área privilegiada en 1998. La propiedad de la mina estaba en manos de la empresa sueca Bolidén.

Este es sin duda uno de los casos de mayor magnitud en lo que se refiere a la ecología y al medio ambiente en España, en total quedaron arrasadas 4.386 hectáreas a lo largo de más de 60 kilómetros siguiendo el cauce del río Guadiamar. Según el CSIC el impacto medio ambiental fue casi 100 veces mayor que el del vertido del Prestige.

El proceso judicial terminó en el 2002 a través de la vía penal, se retiró la imputación a los 21 técnicos que lo estaban y la Junta de Andalucía decidió demandar a la empresa Bolidén para recuperar los cerca de 90 millones de euros que costó la limpieza de los residuos.

Recientemente, en febrero de este año, la Junta volvió a reclamar en una demanda estos costos a la empresa.

Para reparar los daños se diseñó el programa 'Doñana 2005', con este programa se trató de recuperar los afluentes históricos de Doñana. Además sobre la balsa en la que se produjo la rotura se colocaron placas solares y un polígono para reciclado.

Ahora las famosas minas del desastre han vuelto a la palestra con la adjudicación de las minas, Susana Díaz ha paralizado este proceso tras darse a conocer el auto de la juez de Instrucción número 3 de Sevilla que investiga las supuestas irregularidades en la concesión de la explotación a Magtel.

El diario El Mundo se hacía eco de que la adjudicación que en su día hizo la Junta se hizo incumpliendo la ley y que el consorcio no cumplía los requisitos pertinentes.