Redacción Internacional.- El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, ha solicitado una reunión urgente del Consejo de Seguridad de la ONU tras denunciar "una seria violación del embargo" de armas a Costa de Marfil por parte de tres helicópteros procedentes de Bielorrusia.
Ban "ha tenido conocimiento con profunda inquietud de que tres helicópteros de ataque y material de apoyo procedente de Bielorrusia han sido entregados en Yamusukro, capital política del país, por fuerzas de (Laurent) Gbagbo", indicó el portavoz del secretario general en un comunicado divulgado anoche.
Gbagbo pretende mantenerse en la Presidencia marfileña pese al rechazo de la comunidad internacional, que ha reconocido a Alassane Ouattara como presidente electo de Costa de Marfil tras los comicios del pasado 28 de febrero.
El primer cargamento con material militar procedente de Bielorrusia llegó en un vuelo que aterrizó ayer y se espera que hoy lleguen nuevos aviones, según la nota difundida en la web de las Naciones Unidas.
Tras insistir en que se trata de una seria violación del embargo de armas impuesto por la ONU contra Costa de Marfil en 2004, Ban mostró su esperanza de que el Consejo de Seguridad considere conveniente convocar una reunión urgente para debatir el asunto.
"El secretario general exige un respeto total del embargo y advierte tanto al proveedor del equipamiento militar como a Gbagbo de que serán tomas las medidas apropiadas en respuesta a la violación", se añade en el texto.
Ban ha pedido a la Operación de Naciones Unidas en Costa de Marfil (ONUCI) que "siga de cerca la situación y tome todas las medidas necesarias que le permite su mandato para asegurarse de que el material entregado no esté listo para su uso".
Ayer, la ONUCI informó de que tres de sus "cascos azules" resultaron heridos y cuatro vehículos fueron destruidos por fuerzas que apoyan a Gbagbo cuando sus patrullas recorrían barrios de Abiyán "cumpliendo con su mandato de proteger a los civiles".
Los ataques tuvieron lugar en los últimos días suponen una escalada de violencia que, según la ONUCI, "está alimentada por la propaganda que hacen los partidarios de Gbagbo, basada en falsedades".
Gbagbo ha "ordenado" en dos ocasiones la salida de la ONUCI de Costa de Marfil, pero la ONU ha rechazado sus pretensiones, pues no le reconoce legitimidad.
Costa de Marfil está al borde de la reanudación de la guerra civil desde las pasadas elecciones presidenciales, pues Gbagbo no aceptó los resultados y apeló al Consejo Constitucional, formado por sus seguidores, que anuló casi un millón de votos en zonas donde Ouattara tenía amplia mayoría y le dio la victoria.
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