Beberse una cerveza en seis segundos y otras polémicas del ex-líder australiano

El Partido Liberal australiano ha elegido este lunes a Malcom Turnbull como su nuevo líder, por lo que se convertirá en el nuevo primer ministro del país, tras derrotar en una elección interna al hasta ahora líder de la formación y del Ejecutivo, Tony Abbott. La votación ha sido convocada este mismo lunes por el propio Abbott después de que Turnbull le acusara de no haber realizado una buena gestión económica y anunció que quería disputarle el liderazgo del partido y, por extensión, del Ejecutivo.Las tornas se han cambiado entre ambos compañeros de partido, y es que en 2009 la situación se dio al revés de la actual. Abbott le ganó a Turnbull la votación para convertirse en líder del Partido Liberal.Se mantuvo como jefe de la oposición hasta 2013 cuando llevó a la formación al Gobierno australiano del que lleva al frente desde entonces. De corte muy conservador siempre mantuvo posiciones muy escoradas a la derecha en cuestiones como la homosexualidad o el cambio climático, al que describió como una "autentica basura".Un vaso de cerveza en seis segundosLa carrera política del hasta ahora primer ministro australiano no ha estado exenta de polémica tanto por su posición ideológica como por controversias personales. En abril de este año salió a la luz un vídeo en el que Abbott sera capaz de ingerir un vaso entero de cerveza en menos de 6 segundos, lo cual consiguió los vítores de todos los que presenciaron la hazaña. Unos meses antes el jefe del estado protagonizó una campaña para prevenir los peligros de beber alcohol en exceso.

Con un ideología muy conservadora Abbott se encontró con el enemigo en casa. En 2013 la hermana del ex dirigente, Christine Foster, anunció su boda con otra mujer. La familia es lo primero y Abbott no podía perderse el enlace, aunque acudió a la boda tras declarar que nunca podría aprobar ese matrimonio. "Soy muy tradicional en esto, desde tiempos inmemoriales en todas las culturas existen los matrimonios y siempre son entre un hombre y una mujer", espetó el político en declaraciones recogidas por la web australiana 'News'.Abbott es bien conocido por su salidas de tono. En mayo de 2014 fue cazado durante una entrevista radiofónica guiñando un ojo de manera obscena cuando una oyente que llamó a la emisora contó que trabajaba en una línea caliente. El entonces primer ministro olvidó que el programa también se estaba grabando en vídeo. Finalmente tuvo que pedir perdón por su gesto.

No fue la última vez que le acusó de machista. En febrero de 2010 alertó a las amas de casa australiana de los peligros de profesionalizarse. "Deben entender que si comercializan las labores de planchar aumentará el precio de sus facturas de la luz", explicó. Y es que, para Abbott la guerra de sexos tiene un claro ganador, ellos. "Creo que es una locura esperar que las mujeres dominen o incluso que se acerquen a la igualdad en la mayoría de las áreas simplemente porque sus aptitudes, capacidades e intereses son diferentes por razones fisiológicas", dijo.