Sao Paulo, 19 dic.- La Procuraduría brasileña estudia la intervención federal en las cárceles del estado de Maranhao, uno de los más pobres de Brasil y donde sólo en la prisión de su capital, Sao Luiz, murieron 50 personas en lo que va de año, informaron medios de comunicación locales.
El procurador general de la República, Rodrigo Janor, envió un pedido formal a la gobernadora de Maranhao (nordeste), Roseana Sarney, en el cual solicita datos actualizados sobre el sistema carcelario del estado.
Dependiendo de las conclusiones obtenidas tras el estudio, Janot decidirá si pide o no al Supremo Tribunal Federal (STF) la intervención federal en el control de las cárceles de Maranhao, foco de motines y conflictos.
Una comisión de representantes del Consejo Nacional del Ministerio Público y del Consejo Nacional de Justicia (CNJ) realizaron hoy una inspección en presidios del estado.
El pasado martes, una pelea entre miembros de una misma organización criminal ocurrida en el Complejo Penitenciario de Pedrinhas, situado en la ciudad de Sao Luiz, provocó la muerte de cinco personas, tres de ellas decapitadas.
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