Cae la cifra de accidentes laborales en Cataluña en 2011 y sube la de muertes

Barcelona, 8 feb.- El número de accidentes laborales en Cataluña siguió en 2011 la evolución a la baja de los últimos años, aunque se incrementaron los siniestros mortales al fallecer 78 trabajadores, catorce más que en 2010.

De estos 78 fallecimientos, 38 se dieron en el sector servicios, 19 en la industria, 16 en la construcción y 5 en la agricultura, según los datos que ha facilitado hoy en rueda de prensa el director general de Relaciones Laborales de la Generalitat, Ramon Bonastre.

La mayoría de los accidentes mortales fueron traumáticos (35), entre los que destacan, por su número, aquellos en los que el trabajador quedó atrapado y en los que se dio un golpe o colisionó contra un objeto en movimiento.

Además de los 35 accidentes mortales por causas traumáticas, en Cataluña se registraron 28 muertes por causas no traumáticas (como infartos o derrame cerebral) y 15 en accidentes de tráfico durante la jornada de trabajo.

Bonastre ha anunciado que la Generalitat ha puesto ya en marcha este mes una campaña específica para reducir la cifra de accidentes laborales mortales, que se basará en reforzar las actuaciones de vigilancia y control en materia de seguridad laboral.

Buena parte de los 31 nuevos inspectores de trabajo que se han incorporado a la Inspección de Trabajo de Cataluña se dedicarán a esta tarea, así como a investigar los accidentes de trabajo mortales que se produzcan en 2012.

La industria manufacturera aglutina un tercio de los accidentes mortales traumáticos y la construcción un 11 %.

Pese al incremento de los accidentes mortales, Bonastre ha hecho una valoración relativamente positiva del balance de la siniestralidad laboral en 2011, ya que el índice de incidencia (número de accidentes por cada 100.000 personas afiliadas a la Seguridad Social) se redujo en Cataluña un 10,5 % respecto al 2010.

En concreto, el año pasado se produjeron 92.319 accidentes, un 12 % menos que en 2010, de los que 91.557 fueron leves, 684 graves y 78 mortales.

Desde una perspectiva histórica, los 92.000 accidentes contrastan con los 161.000 registrados en 2007, antes de iniciarse la crisis económica.

Bonastre, sin embargo, ha subrayado la necesidad de luchar para reducir aún más la siniestralidad y estos 92.000 accidentes, y en incrementar el rigor sobe el control de los factores de riesgo.

"Como autoridad laboral no podemos admitir que la crisis sea una excusa para no realizar prevención. El actual Govern no rebajará ni un milímetro la presión para que los agentes sociales cumplan con su obligación en materia de seguridad laboral", ha dicho.

Además de la campaña específica contra los accidentes mortales, la Generalitat diseñará un programa específico para los técnicos habilitados de vigilancia y control de las empresas donde se concentran los riesgos más graves, como son el quedar atrapado o chafado y la caída.

El departamento de Empresa y Empleo reforzará además las actuaciones dirigidas a las empresas que concentran el riesgo de accidente de trabajo con visitas y otras medidas.